There's a thin line between LOVE... And HATE...

F. Fail

Los días fueron pasando rápidamente y, con ello, una incomodidad se instaló entre Kensuke y Hasekura.

Al inicio, solo el ojimiel se tensaba con un contacto como un beso, pero ahora hasta se alejaba lo más posible para evitar cualquier contacto, escudándose en Masahiro y huyendo con el.

Esto se hizo, por lo tanto, cada vez más notorio y, aunque el rubio trataba de hablar con el pelinaranja, este no decía nada y prefería mantener más contacto íntimo con él por alguna extraña razón.

Ante eso, Kensuke trataba de pasar más tiempo con su novio para así arreglar las cosas pero, cuando rara vez accedía, este se mostraba distante y hasta indiferente.

Solo hasta que se encontraba con el de ojos verdes volvía en si y hasta se notaba con un brillo, un brillo que hacía mucho no veía.

Fue por ello que había accedido a hacer salidas de 3, pero cada vez él se sentía más desplazado por su pareja.

Por ello, en uno de esos días, al terminarse las clases, Kensuke tomó de la mano al ojimiel separándolo del rubio ya que su mano estaba sujeta al hombro de Masahiro.

Ambos se voltearon confundidos pero el de ojos grises solo miraba al pelinaranja con súplica.

-Tenemos que hablar.

-Debo dejar a Setagawa a su trabajo.

-Solo hoy, por esta vez déjame tener toda la tarde contigo sin que tengas la mente en otro lado.

-Ken...-Empezo a excusarse el de ojos mieles cuando noto cómo este temblaba.

Hasekura entonces pudo ver las lágrimas retenidas en los ojos de Kensuke, y se sintió extraño ya que no sentía lo de antes; ira, protección y anhelo de aliviarlo.

Se sentía mal, por supuesto, pero no de la misma manera, era más... ¿Fraternal?

Masahiro entonces noto que sobraba en ese ambiente de pareja, por lo que empezó a alejarse sintiéndose mal por ser un estorbo, pero también, porque su pecho le dolía al establecer esa distancia con Hasekura.

-Te veré en el departamento, ¿esta bien?

-Pero...-Trató de ir el pelinaranja por el rubio quien sentía lágrimas pero decidió ser fuerte.

-Debes hablar con él, es tu novio, no yo.

Masahiro sintió arder su garganta el decir eso dejando en shock al pelinaranja, quien también sintió dolor en su pecho al verlo tan incómodo.

Kensuke lo noto y se sintió más decidido a llevar a cabo su plan por lo que se acercó y abrazó a Masahiro con tranquilidad.

-Solo será hoy, te prometo que todo se arreglará, por cierto, ¿lo cuidarás por mi?-Susurró el pequeño pelinegro desconcertando al ojiverde.

-¿De qué hablas?

-Lo entenderás al rato, pero por favor, promételo, necesito saber que se quedará en buenas manos-Sentenció Kensuke con tristeza y lástima.

-Yo... Lo haré.

-Bien, gracias Setagawa.

Hasekura no sabía porque sentía ganas de aventar algo al ver a ellos dos juntos de forma tan íntima.

Pero no para el rubio, sino para el que era su novio, ¿qué le estaba pasando?

-Vámonos-Sentenció el más bajo separándose del rubio y tomando al ojimiel quien volvió a mirar al rubio preocupado.

-Llámame en cuanto termines de trabajar, Setagawa.

-Tranquilo, lo haré, no hagas esperar a Oshiba.

Hasekura le sonrió débilmente y se fue de ahí con la mano de Kensuke entrelazada a la suya dejando a Masahiro con el pecho opresivo ante tal soledad.