Son las 12 p.m, la hora se pasa volando. Vemos un panorama algo silencioso, jóvenes apenas levantándose después de la gran fiesta que tuvieron anoche, todos exhaustos, aún mareados, pero ya no como antes.
Decidieron retirarse a sus respectivos domicilios, mientras, quedaron solo 4 chicos.
— Será mejor que también nos vayamos ya, debemos descansar mejor y asearnos— le propone el rubio a la azabache.
— Sí, es verdad, solo que...— no pudo terminar su enunciado, salió corriendo hacia en sanitario, donde terminó vomitando todo lo que había consumido.
— ¡Hey Mari! ¿Estás bien?— pregunta él, preocupado.
— Tranquilo, no pasa nada— dice enjuagándose la boca— nunca había tomado tanto alcohol como anoche y eso me afectó, nada grave.
En eso ella sale, van en busca de sus amigos, Alya y Nino, que por motivos que se desconocen, ya no están en la sala de estar, donde fue la fiesta.
— Deben estar en su habitación— afirmó ella.
Fueron en búsqueda, donde tocaron la puerta, se oye una voz femenina.
— Mari, ¿eres tú?— definitivamente era Alya.
— Sí, sólo venía a despedirme, necesito descansar al igual que Adrien.
— Está bien amiga, no te preocupes, gracias por venir, espero que podamos vernos más seguido, andas distanciada— abrió la puerta, aferrándose de ella para no caer.
— Prometo hablarte y visitarte más seguido, bueno, me voy, cuidate amiga.
— Igualmente Mari, hasta luego— se dieron un abrazo.
— ¿Donde está Nino?— preguntó el oji-verde.
— Está durmiendo, más vale no despertarlo.
— Bueno, dale mis saludos, nos vemos en otra oportunidad, adiós Alya cuidate.
— Adiós chicos.
Ambos salieron del apartamento y se dirigieron al auto, subieron y fueron rumbo a su destino. No recordaban nada de lo que había pasado, sólo eran unas cuantas imagenes fugaces que no podían distinguir muy bien.
— Muchas gracias Adrien por traerme— bajó ella de auto— ¡Hasta mañana en el trabajo!
— Igual Mari, hasta mañana y de nada— respondió y se marchó, directo a la mansión donde vivía, allí le esperaba un gran problema...
Ingresó por la gran puerta principal, entrando a la sala, atravesó el comedor, llegando a su habitación para descansar.
— Hey tú, ¿acaso crees que te mandas sólo? ¿Ya olvidaste que eres casado y que tienes obligaciones? ¿Yo estoy pintada o qué?— genial, la rubia había empezado con su cuestionario.
— Chloé, no estoy de humor para responder tus preguntas hostigantes de "esposa ofendida".
— ¿Pero cómo te atreves?— chilló— Me debes respeto por que soy tu esposa.
— ¡Seas o no mi esposa no tienes ningún derecho de controlar mi vida!— bien, ella logró enfadarlo.
— ¡Pero si a saber donde carajos te has metido! ¡DESAPARECISTE DESDE AYER EN LA TARDE! ¿ACASO CREES QUE NO ME PREOCUPA?
— Yo ya soy lo suficientemente mayor para cuidarme solo, no necesito una esposa que parezca más una persona sobre protectora.
— ¡Lo hago por que te amo!
— Pues vaya que linda forma de demostrar "tu amor"— contraatacó sarcásticamente.
— Me engañas, ¿cierto? ¿¡TIENES A OTRA MUJER, VERDAD!?— sus ojos empezaron a inundarse de lágrimas.
— ¿Cómo se te ocurre? Además, así la tuviera, bien sabes que me obligaron a formar esta "Familia Feliz" y las cosas por obligación no funcionan. Y otra cosa, ya no quiero hablar, voy a dormir, así que haz silencio o retírate. Gracias.
— Eres un maldito, Agreste— amenazó— juro que me las vas a pagar.
Ella salió de la habitación que comparten para ir en busca de su salvador: Gabriel. Dio unos golpes a la puerta de la oficina, sin antes arruinarse el maquillaje por el rostro, despeinarse un poco y arrugarse la ropa.
— Me las pagarás y muy caro— dijo para sí, haciendo una sonrisa maléfica.
— Adelante— se oye la voz del hombre desde adentro de la oficina.
— ¡Gabriel, Gabriel!— empezó a llorar a mares— Adrien me engaña, el tiene otra mujer...
— ¡Pero que dices!— el mayor se alteró.
— Así es, el acaba de llegar, parece que estuvo con ella desde ayer en la tarde, por eso no vino a dormir a la casa— acusaba sin piedad y con su lloriqueo— además su aliento huele a alcohol, me trató horrible...
— Este muchacho me debe una explicación, ¿trató de lastimarte?
— ¿Es que acaso no me ves? ¡Mírame! Por poco y me golpea, solo por la otra... Me ha gritado, incluso a dicho que soy un estorbo y que fue obligado a comprometerse conmigo.
Lloraba aún más, cualquiera pensaba que decía la verdad, lástima que es un lobo con piel de oveja.
— Esto no se queda así— dijo saliendo rápidamente de esta habitación, rumbo a encarar al rubio.
Ingresó sin permiso al cuarto matrimonial, donde yacía un oji-verde completamente dormido y exhausto.
— Adrien despierta— pronunció en tono severo y firme.
— ¿Sí padre?— respondió este, bostezando aún y estirando los brazos.
— ¿Qué manera es esa de tratar a tu esposa? ¿Qué te pasa? Yo no sé si he criado un hijo o una bestia, te he dicho que a una mujer nunca se la toca. ¿¡POR QUÉ TE QUERIAS SOBRE PASAR CON CHLOÉ!?
Ay Chloé, Chloé, ¿con qué me saliste ahora?
❤✨❤✨❤✨❤
¡Hola!
Wiii al fin pude actualizar :D
Aún no acabo lo tarea pero no aguanté las ganas de venir a dejar este cap. UwU
¿Qué les pareció?
Por cierto, he chequeado y hice unas correcciones de la ortografía a todo este fic, si lo quieren leer de nuevo pues... ¡Adelante!
Eso es todo, pero que les guste...
Au revoir petite armée, j' et aime uwu ✌
YOU ARE READING
𝖢𝗈𝗇𝖿𝗅𝗂𝖼𝗍𝗈𝗌 𝖠𝗆𝗈𝗋𝗈𝗌𝗈𝗌 ♡ ~ 𝗔𝗱𝗿𝗶𝗻𝗲𝘁𝘁𝗲
FanfictionMarinette llegó a parar en la casa de los Agreste por una simple Razón: Ella será una de las trabajadoras de Gabriel Agreste, así como lo es Nathalie. Esto le ayudará a unirse con su amor platónico ADRIEN AGRESTE... Pero tendrán uno que otro problem...
