S. D. D

Capítulo 24: ¿Quieres casarte ahora?

Cheng Xu fue empujado hacia atrás por su embestida y se golpeó con el borde de la mesa de cocina a su espalda, tirando de algo que le hizo fruncir el ceño de dolor, pero al menos consiguió contener el grito de dolor que estaba a punto de salir de su boca. Abrazó a su hermano menor y le frotó el pelo, riendo suavemente —¿Ya estás aliviado?

Cheng Jin se arrojó a sus brazos y gritó, aferrándose a él mientras sacudía la cabeza —No me alivia, todavía no me alivia, has perdido peso.

Cuando la familia Cheng entró en bancarrota, Cheng Jin se sintió de lo más miserable, tuvo que venderlo todo, no se atrevió a ir a más fiestas, no le invitaron a ninguna fiesta decente, y cuando se encontró con sus antiguos amigos e intentó pedirles ayuda, sólo se encontró con frialdad o burlas, y al final, sólo pudo evitarlos de lejos. Se sentía tan miserable que cuando fue a ver a su hermano una vez, lo vio trabajando en la fábrica y se dio cuenta de que no era él quien más sufría, sino su hermano.

Qué hombre tan animado era. Dondequiera que fuera, era el centro de atención, rodeado de ricos empresarios y funcionarios del gobierno, pero se había caído de las nubes y se había precipitado directamente al barro. Su hermano había sufrido cien veces más y mil veces más que él, ¡Nunca sufriría de la misma manera que el!

En lugar de compadecerse de sí mismo, su hermano mayor intentaba resolver el problema y superarlo.

A partir de ese momento, Cheng Jin decidió que él también debía trabajar duro y confiar en sus propias habilidades para aliviar la carga de su hermano.

—Estoy bien, estoy bien, no te preocupes, pequeño no llores, no llores... —Cheng Xu palmeó suavemente y persuadió a su hermano menor, al ver que no podía persuadirlo, le dijo —¿No querías preparar algo delicioso para mí? Ni siquiera he desayunado antes de venir, y ahora ya tengo hambre oh.

En cuanto dijo esto, Cheng Jin dejó de llorar de verdad y levantó la cabeza de los brazos de su hermano mayor, con un aspecto lamentable y con marcas de lágrimas todavía en su piel de nieve de jade. Moqueó y dijo —Ahora mismo lo hago, hermano, la sopa está lista, antes te sirvo un plato.

—No hay prisa, y es un poco grosero hacerlo, vamos a beberlo juntos más tarde.

—No es de mala educación, todos lo han hecho. —Cheng Jin cogió un cuenco y le sirvió un plato de sopa a su hermano mayor sin más, y le miró con la respiración contenida —Pruébalo, a ver si ha mejorado el sabor...

Cheng Xu tuvo que tomar la sopa y dijo con una ligera sonrisa —Definitivamente ha mejorado, huele muy bien.

Cheng Jin se alegró por el cumplido y, mientras empezaba a freír las salchichas rojas en aceite, preguntó —Hermano, ¿qué haces ahora? ¿Sigues en la fábrica?

Hubo una pausa en el movimiento de beber la sopa, y Cheng Xu dijo tranquilamente —Bueno, me he cambiado a una fábrica.

—¿Qué está produciendo?

La mente de Cheng Xu estaba un poco desordenada, las palabras que debería haber pensado en un principio no fueron pensadas en absoluto debido al constante acoso del hombre, sus ojos se desviaron y se posaron en el pescado que Cheng Jin había manipulado y dicho —Manejo el pescado congelado.

—¿Eh? ¿No es eso sucio? —Cheng Jin estaba un poco angustiado.

Cheng Xu sonrió —La máquina se encarga de ello, sólo tengo que controlar la máquina, no es sucio.

Cheng Jin era tan simple de mente que no notó nada malo, en su lugar se sintió aliviado —Eso es bueno —volvió a preguntar —¿Cómo has llegado hasta aquí con Yan Qi? ¿No me lo habías dicho antes? Me dijiste que no me acercara demasiado a él, diciendo que no era puro de mente, ¿cómo es que aún así te acercaste a él?

Cheng Xu no cambió su cara y dijo —Me topé con él en la entrada por casualidad, así que entramos juntos.

—No me extraña —Cheng Jin no lo dudó —Pero en realidad es primo de Ai Xue, es extraño, pero igual se parecen un poco.

—No es extraño —Cheng Xu habló sobre este tema, todo relajado —Es normal que las familias nativas se casen entre sí para defender sus derechos, sólo cuando están unidas, tienen más posibilidades de éxito. Pero recuerdo que cuando Yan Shi, es decir, la madre de Ai Xue Rigel, debería haber tenido una candidata mejor en ese momento, pero acabó eligiendo al cabeza de familia de los Rigel, y mucha gente no sabía por qué, y llamaba en broma a su unión la bella y la bestia.

Cuando Cheng Jin escuchó esta descripción, pensó en las otras personas que había conocido con el apellido Rigel y pensó que era increíblemente apropiado, no pudo evitar sonreír —Qué dañino, tal vez la gente se siente atraída.

—Tal vez.

La voz de Cheng Jin bajó un poco —Entonces los padres de Yan Qi son una unión dentro de la familia oh? Lo recuerdo, ¿no?

Escuchar este nombre siempre perturbaba el corazón tranquilo de Cheng Xu, especialmente este año. Dejó escapar un suave "hmmm", dejó su cuenco limpio y preguntó —¿Necesitas mi ayuda?

—No, no, no sabes cocinar en absoluto, puedes hablar conmigo —Cheng Jin sabía que su aparentemente omnipotente hermano mayor en realidad tenía un defecto: era un "asesino de la cocina", no podía cocinar nada en absoluto, ¡incluso los ingredientes más simples serían incomibles después de su cocina! Quería hacer una tarta para su hermano a los veinte años, y Cheng lo estaba deseando, pero el resultado fue un incendio en la cocina.

Después de eso, Cheng Xu básicamente no entró en la cocina, y aunque lo hizo, nunca tocó nada.

Pensando en esto, Cheng Jin se sintió triste de nuevo —Hermano, nadie cocinó para ti, ¿has comido una sopa nutritiva durante los últimos dos años?

Cheng Xu dijo —Nada de eso. 

Al fin y al cabo, los gastos médicos de su padre corrían en su mayoría a cargo de su hermano mayor, su salario no era elevado y no podía retirar parte de su saldo, por lo que el poco dinero que le quedaba probablemente sólo alcanzaba para comprar sopas nutricionales. Cheng Jin dijo —Debe ser así, hermano, no me consueles, sé lo duro que has vivido estos dos últimos años, más o menos. Si te hubieras casado entonces, si hubieras tenido una cuñada, tal vez ella hubiera cocinado y te hubiera cocinado sola a ti.

Al escuchar estas palabras, la imagen de cierta figura alta cocinando para sí mismo vino de repente a la mente de Cheng Xu, y su corazón se irritó un poco. Cheng Jin frió la salchicha roja y comenzó a cocinar el pescado al vapor, y cuando terminó, preguntó con cuidado —Hermano, ¿tienes alguna idea de casarte ahora?

Sabía que no debía pedirlo, dada su condición actual, era realmente difícil encontrar una pareja que estuviera dispuesta a casarse con él. Sin embargo, cada vez que Cheng Jin pensaba en la imagen de su hermano estando solo, era difícil de sentir en su corazón. Pensó que si su hermano tenía esta idea, trabajaría un poco más, aceptaría unos cuantos pedidos más, ganaría un poco más de dinero y quizás podría casar a su hermano.

Cheng Xu estaba a punto de responder cuando la cocina se oscureció de repente y una figura alta bloqueó la puerta, casi tapando la mayor parte de la luz. El hombre dijo con pereza —¿De qué estás hablando? ¿Te vas a casar? —Yan Qi miró a Cheng Xu, sus ojos se llenaron de risa y su tono fue relajado —¿Hay alguien con quien el hermano Xu quiera casarse?