6 de Octubre, 2001
Desperté tarde en sábado, era algo que solía hacer siempre, no había mucho que hacer y prefería dormir, pasaban de las 10 y baje a la cocina a prepararme una tostada con mantequilla de maní, parecía que habían utilizado toda esa mañana pues no quedaba nada, algo no muy común, mientras le daba unos mordiscos subí a la primera planta donde visualice a Luther y Allison en la sala sonriéndose como toda una pareja, me preguntaba porque Luther tampoco me había despertado en la mañana ni me había entregado la barra, al fondo de la habitación se encontraba Klaus, maldito mal tercio, no hice nada solo baje de nuevo pero esta vez hasta la sala común, las risas inundaban el lugar y sonreí.
Estaban Ben, Diego y Five, todos gritando y riendo si parar, pude notar como palidecieron al verme entrar —Hey! ¿Por qué no me despertaste? —pregunté tirandome en el sillon junto a Diego
—Bueno creí que no querías que lo hiciera— dijo y se levantó despues.
—Mmmm, Luther tampoco lo hizo, pude haber dormido hasta la 1 de la tarde de no ser porque me dió hambre
—JAJAJ claro — dijo Five entre dientes y después me sonrió, realmente me volvía loca.
—Vamos Ben, voy a mostrarte ese juego de internet, vamos— dijo Diego y jaló a Ben hacia arriba, quería ir con mi hermano pero ni siquiera me dió oportunidad de decírselo, había desaparecido en las escaleras.
—¿Quieres ver una película?— pregunté a Five, el único que aun se encontraba en la habitación.
—En realidad no— dijo, claro, era Five, no iba a ser tan fácil.—Quiero decir... Preferiría, ya sabes, salir a tomar aire, con tantas cosas no he podido hacerlo, vienes?
—Claro ¿Por que no?
Ambos llegamos igual de rápido afuera, cualquier oportunidad de competir debía ser aprovechada. Esperaba que fuéramos al quiosco pues era el lugar donde solía ver a Five y Ben leer, sin embargo me guio detrás del sicomoro más grande, realmente estaba sorprendida, lo había hecho, solo nosotros dos.
Una manta cubría el pasto y había dos platos llenos de sándwiches de mantequilla de maní y malvaviscos, no pude evitar sonreír, era todo lo que podía pedir.
—Yo... Lamento no haber preparado algo bueno, algo más rico, aunque es rico para mi, bueno es que no quería pedirle ayuda a mamá y es lo único que sabía hacer, quemaría incluso el cereal, ahora se que justamente fue por eso que te enojaste, no porque no sepa cocinar, bueno hablé con Diego y me explico, dijo que tu... que... no crees que las mujeres sean inferiores y te juro que yo tampoco y ahora lo entiendo, de verdad, yo... bueno, yo ya no volveré a decir cosas así, lo juro, T/N como lo siento, enserio, te juro que no era mi intención, ahora estoy hablando mucho ¿cierto? perdon, no me mires asi, por favor, se que parezco un completo idiota.— dijo lentamente mientras miraba a cualquier otro lado, yo no podía evitar sonreír, actuaba tontamente cuando se ponía nervioso.
—Mierda nunca que te había visto tan malditamente nervioso— reí entre dientes justo como el
—Solo tu me pones así T/N— podía sentir lo caliente que estaban mis mejillas al escuchar eso, al igual que esas mariposas que suelen contar en los libros de amor —Amm ¿te gustaría probar mi majar?— pregunto extendiendo un sandwich hacia mi y alzando sus cejas
—Con gusto.
Ambos nos sentamos en la manta, demasiado avergonzados y si siquiera sabíamos el porque.—El otro dia— dije y el volteo rápidamente a verme— dijiste "te conozco bien" o algo asi ¿De verdad crees que lo haces?
—Sí, bueno quizá no a la perfección pero se mucho de ti.
—¿Cómo qué?
—¿De verdad?— alzó una ceja y asentí —Se que eres una persona muy reservada, que solo con Diego logras ser tú, sin importar nada te diviertes, eres arrogante pero odias que la gente lo sea, razón por la que me odias— reí entre dientes
—No te odio— él solo volteo a verme y siguió
—Te preocupas mucho por todos, encima de ti incluso, se que la única persona que te saco del problema... el de tartamudez, fue Luther, se que te gusta mucho leer y nunca he comprendido porque no lo haces conmigo, tienes eso en común con numero 1, se que no te importa el dinero y que odias pasar todo el tiempo dentro de la academia, por eso decidí hacer esto aunque sea al aire libre.— terminó y me miró con inseguridad
—Wow, ahora se que no se nada — reí al igual que él—nah, creo que me describes bien Five, pero dudo que yo sepa mucho sobre ti
—Lo que quieras saber de mi pregúntaselo a cualquiera, todos están al pendiente de mi— dijo y una sonrisa arrogante se formó en su rostro.
—Oh si claro —ambos reímos— quizá también se mucho, no porque esté al pendiente de ti... pero soy muy observadora
—Eres Sherlock
—Correcto—comencé— Tienes una obsesión con el café que nunca he entendido, incluso tu perfume huele a eso, no te gusta leer, solo lo haces porque es necesario y entretenido, Ben es la única persona que conoce hasta tus pecados, no te gusta asolearte, odias a la gente que es gentil, que intenta preocuparse por tus asuntos, amas con todo tu ser la tecnología, le tienes miedo a la muerte y un gran pánico a las abejas—dije y luego voltee a verlo, sonreía como nunca — oh y amas con locura los sándwiches de mantequilla de maní y malvaviscos —agregué.
La tarde se pasó así, datos del otro, incluso Five confesó que Ben había ganado el concurso de besar a una chica antes que todos pero nunca quiso contárselo a nadie y dejo que Diego se llevara el primer lugar, fue un tonto concurso entre los hermanos Hargreeves hace unos meses.
No revelé secretos de mi hermano, no iba a contar que le pago a esa chica, sería vergonzoso para él .
Pasadas las 3 de la tarde entramos a la academia pero no había nadie, así que decidimos bajar a la sala común donde probablemente se encontrarían todos, al pisar en último escalón todos los presentes aplaudieron, como si hubiese sido todo un logro la ¿cita?
Estaba Klaus, Luther, Diego y Ben, Allison y Vanya probablemente estaban siendo ellas mismas aisladas de los demás hermanos, nunca entendía porque no querían unirse, a pesar de ser invitadas a todo no asistían, algunas y repentinas veces Allison estaba con Luther charlando o Vanya con él en el laboratorio.
Nadie dijo nada, solo nos sentamos y disfrutamos la película hasta que Diego se dignó a hablar—Mierda necesito detalles, ya se aman?
Pude ver cómo sonreía satisfecho pero no pronunció ni una palabra, Luther quiso cambiar el tema y le preguntó a Klaus si sabía el nombre del director de la película que veíamos, pero fue ignorado.
—Creí que abandonaríamos este tema después de su última tonta competencia de besos, ni siquiera es la gran cosa—hablo Klaus.
—Oh vamos, cuando beses a una chica te darás cuenta que si es la gran cosa y un tema emocionante, relájate Klaus—respondió Diego, las mejillas de Klaus estaban roncas y no estaba segura si eran de pena o furia pero se levantó poco después sin decir nada más y se fue, Luther claramente fue tras de él, ambos parecían lo suficientemente incómodos.
Creí que lo podía estar más feliz, no sabía lo que había significado la tarde con Five, pero esperaba que fuera el comienzo de algo realmente bueno así que no pensaba en nada más.
—¿Qué haremos en Halloween?—hablo Diego
—Falta un mes para eso—contestó Ben
—¿Que tal una fiesta de disfraces? —siguió Five
