Un día nublado
bajo las estrellas
que no se ven,
eclipsadas por las manchas
blancas,
tristes,
pegajosas,
que gritan «¡Tormenta!»
y no dejan respirar,
me hundo entre mis rodillas
y pego las piernas al pecho.
No voy a llorar,
repito,
no voy a llorar.
Ya estoy grande
para estas cosas,
aunque me sienta
diminuta,
ínfima
volátil.
No voy a llorar,
pero lloro,
y lloro,
y espero impacientemente
a que su voz
llegue a mi corazón,
y me diga
que todo está bien,
que con él estoy a salvo,
que no ocurre nada en realidad,
porque estoy bien,
y él está conmigo.
Las lágrimas,
diminutas,
ínfimas,
volátiles,
se secan en mis ojos,
y ya no lloro,
porque estoy sonriendo levemente,
arropada por la calidez que emana
el hombre que elimina las nubes de mi cielo
y me ayuda a ver las estrellas.
Qué suerte tengo,
que lo tengo todo.
~A. 300721
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El Idioma Del Invierno ©
PoetryEscribo poesía siempre que un sentimiento inunda los caudales de mi vida. Es mi forma de desangrarme y no morir, pero sí nacer más fuerte. --------------------------------- INICIADA: 18/01/21 FINALIZADA: 24/11/22 ---------------------------------
