ᴄɪᴛᴀ ᴅᴏʙʟᴇ - ᴘᴀʀᴛᴇ ᴛʀᴇꜱ

1.1K 130 27
                                    


























𝐎𝐑𝐎 𝐘 𝐓𝐎𝐏𝐀𝐂𝐈𝐎
♡: ʸ ᵃ ᵗ ˢ ᵘ ᵐ ⁱ ʳ ᵒ _ ᶜ ʰ ᵃ ⁿ

𝐎𝐑𝐎 𝐘 𝐓𝐎𝐏𝐀𝐂𝐈𝐎♡: ʸ ᵃ ᵗ ˢ ᵘ ᵐ ⁱ ʳ ᵒ _ ᶜ ʰ ᵃ ⁿ

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.



























— ¿vamos al parque? – preguntó Kenma.

Asentí, estaba muy emocionada. Quería ir a aquel árbol, endonde nos conocimos. Quería averiguar aquel tronco en donde grabamos nuestros nombres. Queria poder ver el mismo paisaje y que mis recuerdos estén a flor de piel.

Pero, sobretodo, poder ver a Kodzuken. El me prometió que siempre me esperaría en aquel árbol, se que nos rencontraremos. El me lo prometió...

Al pisar el parque sentí como empezaba a temblar, sentí mis emociones fluir, salir de mi mente. Mis nervios aumentaron más y más y más a medida que nos acercábamos a aquel lugar.

Kenma solo me seguía, tampoco tardo en notar mis nervios.

— ¿Yashiro, te encuentras bien? – preguntó Kenma preocupado.

Yo asentí, aunque tenias ganas de llorar. Mis ojos ardían y mis manos sudaban. Empecé a caminar aún más rápido, al punto de correr. El pobre rubio estaba muy confundido.

Llegué a aquel árbol, le di la vuelta, esperando a que el estuviera. Hace años que no lo veía.

Pero...

Solo se encontraban nuestros nombres grabados en el tronco, el lugar estaba solitario, solo, desierto y todos los sinónimos posibles de aquelas palabras.

Mi desilusión fue enorme, solo caí de rodillas frente a aquella frase, empecé a llorar. Mi respiración se empezó a descontrolar y mi ilusión estaba en el piso.

— K-Kodzuken...– murmuré.

Se que Kenma me debe estar viendo como una rarita. Se que me debo estar haciendo el ridículo ante el. Se que me debe estar viendo como una llorona.

Pero era incapaz de controlar aquel dolor.

Sentí como Kenma me abrazo por la espalda, me susurró a mi oído.

— no llores, Yatsumiro, estoy aquí, contigo y nunca te abandonare, yo nunca te olvidaría.

Mi llanto cesó, una gran cantidad de felicidad y nervios llego a mi cuerpo de golpe.

— ¿K-Kodzuken? – dije en un hilo de voz, claramente sorprendida y confundida.

El me abrazo aún más fuerte, yo solo me di vuelta para también volver a abrazo. Escondí mí cabeza en su pecho, volví a llorar. Sentí como nuestras emociones se mezclaban.

— te extrañe demasiado, Yatsumiro – dijo  Kodzuken mientras acariciba mi cabello.

Me separé levemente de el, volví a mirar sus ojos. Allí sentí que el tiempo se detuvo. Nuestras respiraciones empezaron a chocar, cada vez estábamos aún más cerca. Estábamos por besarnos...

— ¡Yashiro, Kenma-kun! – al oír eso inmediatamente nos separamos – los hemos estado buscando por todos lados.

Gen, Kuroo, vinieron en un mal momento. Trate de levantarme como si nada hubiera ocurrido, Kenma igual. Estaba bastante incomoda.

— Yashiro ¿estuviste llorando? ¿qué sucedió? – pregunto preocupada.

— esto... – mantuvimos in silencio incomodo pir un rato, luego procedí a explicarle – ...Kenma es la misma persona que...Kodzuken.

Kuroo y Gen se quedaron boquiabiertos, sin ninguna palabra que decir.

— ¿entonces tu eres Yatsumiro?  – preguntó Kuro, incrédulo.

— si...

— ¿y tu eres Kodzuken? – ahora preguntó Gen incrédula.

— si – respondió Kenma.

Ellos se quedaron pensando, luego de unos segundos reaccionarion. Gen me tomó de los hombros y me empezó a sacudir de un lado a otro.

—¡¿Por qué no lo besas?! ¡es la persona que más amas es todo el mundo! ¡besalo!?

— ¡cállate, Shizukana! – dije para taparle la boca, mis mejillas estaban ardiendo.

Luego de eso decidimos ir a tomar un café. Lo que acaba de pasar fue realmente como una explosión de mis emociones.

























Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


























𝐎𝐑𝐎 𝐘 𝐓𝐎𝐏𝐀𝐂𝐈𝐎 - 𝐊𝐞𝐧𝐦𝐚 𝐊𝐨𝐳𝐮𝐦𝐞Where stories live. Discover now