Aliados 3 Temporada [Completado]

Capítulo 18: Imposiblemente posible

-¿Vas a seguir dándome robándome besos? -dijo luego de unos segundos.

-Sip.

-Entonces si -ambos sonreímos y nos besamos. Mary entró a la habitación sin golpear la puerta y se tapó los ojos.

-Me pone muy feliz que se hayan arreglado pero Valen tenés que ir al colegio -dijo.

Aunque me quejé Mary me obligó igual a ir al colegio.

Pero estaba feliz. La escuela no arruinaría mi día porque yo estaba de novio con Devi. Nadie podría borrar la sonrisa de mi cara.

*****

Ámbar miraba a Gopal. Gopal miraba a Ámbar. Era un simple y absurdo juego de miradas que ambos se negaban a admitir. Estaban en la cocina, junto a Luz, Venecia y Noah. Todos desayunaban en silencio lanzándose miradas de vez en cuando. El único sonido era el proveniente de la boca de Luz que tarareaba una canción con los ojos pensativos. Noah miró su teléfono celular por quinta vez y bufó.

-Le dije que me llamara -susurró.

Gopal miró a Noah pero este estaba ocupado con la tarea de romper una galleta que tenía en la mano. Matías entró a la cocina agitado y de golpe la tomó a Luz del brazo y la sacó de aquel lugar. Los cuatros chicos miraron sorprendidos hacia la puerta por la que ambos habían desaparecido.

-¿Y a este que le pasa? -preguntó Venecia.

-No se, pero me dio una idea -dijo Gopal parándose. Miró a Ámbar y ella se encogió en su asiento por instinto. Él la tomó de la mano y la arrastró hacia afuera de la cocina.

Venecia y Noah se quedaron solos.

-Supongo que nos toca lavar a nosotros -dijo Noah con aburrimiento.

-A mi me toca supongo -dijo ella en tono duro -las mujeres son las que lavan los platos -susurró.

-No hablaba en serio -dijo Noah resoplando. -hablé sin pensar, las mujeres sirven para más cosas. Sin las mujeres este mundo estaría perdido, de verdad.

Venecia sonrió.

-Lo se -dijo mientras llevaba su taza a la pileta -solo quería que lo admitieras.

-¿Estamos bien ahora?

-Claro -lo miró -pero no te quedes ahí, ayudame a lavar esto.

Noah sonrió y la ayudó a limpiar la cocina pensando en la tontería por la que habían peleado.

*****

-Auch ¡Matías! -dijo Luz sobándose el brazo -¿qué te pasa? -le preguntó mientras veía como él cerraba la puerta de la habitación.

-Pasa, que por tu culpa ahora todos los de la universidad piensan que me como los mocos -Luz soltó una carcajada y Matías la fulminó con la mirada -no es gracioso.

-Si lo es.

-¡No! -puso ambas manos en su cabeza exasperado.

-¿Te comes los mocos?

-¡Carajo no! -Luz volvió a reír.

-¿Entonces porque te enojas si sabes que es mentira?

-Porque pasé de ser el más codiciado, al que se come los mocos, eso no es bueno para mi reputación -lo dijo como si fuera lo más importante del mundo. Luz borró su sonrisa.

-Quizás no seas el más codiciado, si un rumor hace que eso cambie -Matías se cruzó de brazos y la miró enojado.

-No es así, yo siempre tuve a las chicas que quería tener.