「 Etapas - TomTord 」

「 2 」

—¡Un momento! Sin pruebas tus calumnias no son validas— Tom estaba enfadado.

De pronto se escucho otro golpe en la mesa, Tord se había levantado mirando a todos a los ojos, que macho. —Fui yo, yo la compré, yo compre esa revista y las escondí entre las de Tom, que vergüenza, pero las palabras de Edd me conmovieron—

Ahora la sorpresa venía del otro lado de la mesa —No... son mías—

—¿Tom?— Increíble, todos estábamos sin habla, estaba seguro que Tord había sido responsable todo este tiempo.

—La semana pasada vi a Tord viendo hentai en su celular, me dio curiosidad y compré las revistas—

—¿Eres bobo? Pudiste buscarlas en Google incógnito— Yo seguía incrédulo.

—Es que me daba oso que el de la compañía de internet viera que buscaba eso y se burlara de mi entre sus amigos— ahora se hacia el sufrido escondiendo su rostro en el antebrazo.

—Oww Tom, tranquilo— Matt se acercó a darle un abrazo —Nosotros te apoyamos—

—Quitate, no te voy a comprar el peluche—

—Demonios— enseguida se apartó.

Aún así no entiendo, entonces ¿por qué Tord se culpó a si mismo? Me gire a verlo y estaba igual de confundido. —Espera ¿eso quiere decir que me espías? Y más importante, ¿Hay más revistas? Yo también compré—

Ambos se miraron un momento, se veían incómodos. — Salgan los dos a tirar esas cosas fuera de mi propiedad, no quiero verlas ni en el bote de basura de afuera— Estoy tan decepcionado de vivir con dos degenerados y un vendido, no quiero ver a nadie, puras desgracias en esta casa.

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Los culpables fueron al baño a buscar el resto de las revistas, en total eran tres, dos tenían la misma portada de tentáculos y la otra era un manga escolar.

—¿Esta es tuya?— Tord la levanto la shoujo incrédulo, lo abrió y ojeo un poco.

—Deja— Se la arrebató y camino fuera del baño con sus respectivas revistas, detrás de él lo seguía noruego bastante confundido aún.

—Tom tenemos que hablar, no entiendo todo esto de comprar hentai namas porque a me viste buscando—

—Cállate commie, no voy a dar explicaciones y mucho menos a ti—

Tord ahora estaba molesto, ¿acaso jamás lograría tener una conversación sin insultos con él? —Jódete, es tan difícil tratar contigo— se adelantó fuera de la casa.

Tom lo vio y rechistó, el tampoco entendía el por qué sintió la necesidad de buscar entre los intereses del noruego, ¿tal vez era un oculto sentimiento de querer amigar con él? Habían empezado con el pie izquierdo por su culpa, el pasado mes se había estado sintiendo culpable de eso, era incomodo estar en casa a solas, nunca faltaba una discusión tonta que terminaba en el silencio absoluto o Edd interfiriendo molesto con alguno de los dos.

—Commie—

—No me llames así, maldito testigo de jehová— el noruego no se detenía en su búsqueda de una basura que no fuera la de la casa entre las calles nocturnas y solitarias.

Tom había estado a punto de pedirle una disculpa, que tonto se sentía —Degenerado—

—Acosador—

—Comunista—

—Pervertido—

—Noruego—

—Mi nacionalidad no es un insulto— Tord de giro irritado.

Ambos se detuvieron con revistas en mano —Con ese acento estupido si—

Tord enojado le tiro la revista en el pecho —Eres un infantil—

—¡No me-¡ ¿¡Quieres que te golpeé!?— tiró sus revistas al suelo.

—Tu te lo estás ganando—

—¿Qué? ¿Crees que un día de gimnasio te hace un luchador profesional? Ni con los años de ejercicio en Noruega me ganarás — ya estaba listo para tirar el primer golpe.

Tord se rió  —Que desagradable eres, me espías y ahora sabes de mi vida en Noruega, eres un ridículo—

Tom se puso algo nervioso, ¿que mierda le pasa? Hace tiempo que Edd le había contado algunas cosas, entre ellas algunos pasatiempos del noruego que fue imposible no llamar la atención de Tom "tenía una buena vida en Noruega ¿por qué venir hasta acá solo por aburrimiento?" Pensó en aquel momento.

Tom se agachó por las tres revistas y caminó por su lado hasta la basura de un vecino cualquiera. Tord solo lo siguió con la mirada hasta perderlo de regreso a casa, no podía estar más confundido ¿por qué el interés en él?