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—Deja de rogar y temblar, ya estás muerta a mí lado.— exclama Tord

—Y tu deja de ser tan surrealista, estoy muerta todos los días.— dijo con una pose dramática

—Deja de ser tan emo.— dice bajando levemente el arma

—¡Ya callense los dos, los vamos a liquidar y ustedes bromeando!.— éste chasquea los dedos dando así las órdenes

—Ehhh ¿Tord?.— el antes nombrado mira a la contraria esperando su dialogo—no sé cómo manej..- — en un simple accidente la muchacha presiona el gatillo, matando a dos de los contrarios

—¡Muy bien hecho! Sabía que podías.— dice con voz de madre y apretando el gatillo para dispararle a dos de aquellos hombres

—Pero fue un accidente, e-eso está mal, no quería hacerlo.— pensó mirando nuevamente el arma y tirándola al suelo, luego de aquel válido intento de agacharse y tomar de nuevo el objeto, una carga se escuchó arriba suyo

—Muy bien hecho.— una serie de aplausos se escucharon—pero mis hombres son mejores, y al parecer más inteligentes..

El de cuernos no dejó terminar al rubio, lanzó a la cabeza de uno de esos “hombres” noqueandolo al primer intento

—Eso fue rápido.. creo.— dijo mirando como Tord imitaba una pose heroica

Cuando ambos miraron a la dirección donde debería de estar Mark, este ya no estaba

—Todos son raros, pero hace bastante que no tenía una aventura así.— dice sacudiéndose la ropa y caminando hacia adelante esquivando a Tord que miró como la chica se alejaba

—Te tengo que llevar a tu casa ¿O eso es lo que se hace en estos casos?.— espeta siguiendola

—No hace falta, además sería muy cliché.— ésta seguía caminando con las manos en los bolsillos mientras el de cuernos intentaba detenerla

—Este lugar es peligroso, no puedes ir tu sola.— la joven lo miró arrogante a obedecer sus órdenes—como tu jefe te obligo a no seguir caminando.

—No eres mi jefe en la calle.

—Claro que si.

—Claro que no, es un país libre.— antes de poder decir otra cosa el de cuernos interviene con su caminata de una vez por todas, parecía más una criatura totalmente negra, como su sombra, apenas se le veían los ojos

—Este es mí país, y si quiero lo esclavizo, no tienes el control sobre mí, una personas común y corriente, así que da media vuelta y ponte a trabajar maldita.— ___ no tuvo más opción que obedecerlo sin rechistar

—Perfecto, atrapada en esto contigo, y ahora quedé mal delante de mí jefe.— decía rosando su calzado contra la acera, causando un sonido bastante molesto para el contrario que la veía con desprecio—¿Que? SEÑOR.— dijo resaltando la palabra y mirándolo de reojo

—Deja de hacer ese ruido tan molesto niña.— la joven rodó los ojos y continuó mirando hacia el frente caminando correctamente, haciendo sentir más contento a Tord

(...)

Unos golpes en la puerta alertaron a Edd que salió desprevenido con un bate de metal

Everything for me| Tord Mafia Boss x readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora