Salimos de la tienda satisfechas, ella había comprado un vestido rosa, se le veía divino a decir verdad. La tardé pasó lento, hasta que se llegó la hora de comenzar a alistarme, tomé una ducha, me cambié y me maquille algo discreto, peiné mi cabello con un par de rizos, tomé la dirección de Venable, cuando llegué ese día la apunté en una hoja y la pegué en mi espejo, la puse en mi teléfono y volví a pegarla dónde estába, bajé y mi hermana ya estaba lista, con ella estába Eric, como siempre, ese chico parecía no tener hogar.
- Hola Eric - saludé al chico y sonrió - Yaz ya me voy te veo allá - dije y tomé las llaves del auto, salí de casa y me subí, mi vestido era largó y llevaba tacones, yo no era experta en esto así que me los quité y subí mi vestido hasta mis piernas para poder conducir y no morir en el intento, conduje hasta la casa de Wilhemina. Cuando llegué me sorprendí bastante hasta dudé que fuera la residencia, era enorme su casa, blanca con jardín y flores violetas, definitivamente era de ella.
Salí del coche, coloqué mis tacones y caminé hasta la puerta, tomé aire, una o dos veces más y toqué. No obtuve respuesta, así que toqué otra vez. La puerta se abrió dejando ver aquella mujer que me robaba el aliento y la vida. Traía un vestido blanco de corsé, la espalda cubierta y un escote al frente que llegaba hasta la mitad de su abdomen, se veía hermosa.- Que puntual eres - dijo llamando mi atención, la miré a los ojos y le sonreí.
- ¿Esperaba menos de mi? - dije sonriendo, extendí mi mano a ella - ¿Vamos? - ella la tomó.
-Encantada - respondió, cerró la puerta de su casa sin soltarme de la mano, y caminó junto a mi.
- Te vez encantadora - dije abriéndole la puerta del auto.
- Oh gracias! Ahora veo que seguiste mi consejo de comprar el vestido - me guiñó un ojo y se adentró al carro, mi sonrisa no se borraba, ella era el motivó. Rodeé el auto y me adentré en el, repetí mi acción de ahorita, me quité mis tacones y subí mi vestido, ocasionando que Venable riera.
-¿Por qué te los quitas - dijo con una sonrisa en su rostro.
- ¿Prefieres estrellarte? - pregunté con la misma sonrisa.
- Definitivamente no, damelos, te los cuidó - sin decir nada más los tomó, encendí el auto y comencé a conducir, la música salía de las bocinas, era tranquila. De reojo podía ver a Venable que no me quitaba los ojos de encima pero no dije nada, disfrutaba de eso.
- Tienes hermosos ojos - dijo de pronto en forma de susurro, casi inaudible, creó que pensó en voz alta. La miré por dos segundos y ella tenía puestos los ojos en mi, le sonreí y le regalé un guiñó. Después de unos minutos llegamos, en el parking estába un muchacho que ayudó a bajar a Venable rápido puse mis tacones y fuí por ella y le di las llaves al chico, le tendí la mano a Venable y la aceptó gustosa, su agarre me daba una seguridad indescriptible. El lugar era bastante grande y lujoso, estaba acostumbrada a ir a esté tipo de eventos por Yazmín, pero siempre me sorprendía, busqué a mi hermana con la mirada mientras me adentraba con Venable tomada de mi mano.
-¿Quieres un copa? - pregunté, Wilhemina me miró y asintió.
- Me encantaría - me regaló una sonrisa bastante encantadora.
- Vamos a la barra, después los buscaremos - dije y ella caminó siguiendo mis indicaciones. Le dije al bartender lo que queríamos y lo trajo rápidamente.
- ¿Iremos mañana a ver el salón? - pregunté, la miré, realmente era hermosa, podía quedarme viéndola todo el día y no me aburriría.
- Si, justo eso te iba a preguntar, ¿a qué hora?- dijo dandole un sorbo a su copa.
- Temprano, en la tarde tengo un compromiso- copié su acción, el vino era amargó y secó, bastante exquisito.
- Me parece bien, ¿que harás mañana?- preguntó mientras jugaba con su copa.
- Iré con María al hotel de mi hermana - respondí.
- Ah, bien - dijo pero ya no pude responder ya que una mujer interrumpió.
- Camille! Pero que gusto volver a verte - saludó, no me dió tiempo a reaccionar ya que se abalanzó a abrasarme.
- Hola Lily, que gustó - la abracé y ella me besó la mejilla - Mirá ella es Wilhemina Venable, es una amiga del hospital - dije sonriente.
- Hola, soy Lily Rabe amiga de Camille - dijo extendiendo su mano, Wilhemina dudó en tomarla pero al último lo hizo. Lily y yo nos conocimos en una de estás fiestas, ella también tenía hoteles de lujo que administraba.
- Un gustó- respondió Wilhemina con una sonrisa falsa, era muy mala disimulando por lo que veo.
- Rabe!! - se escuchó de lejos.
- Mierda tengo que ir, te llamó más tarde - dijo volviendo a darme un beso en la mejilla y guiñando un ojo.
- Claro que sí - dije con una sonrisa. Volví a mirar a Venable y ella me miraba extraña.
- Es linda - dijo Venable sería.
- Si, lo es - respondí terminando mi copa.
- ¿Estás saliendo con ella?- preguntó de pronto, estaba atenta en mis próximas palabras.
- No, no, sólo somos amigas y ella es bastante agradable - dije con una sonrisa, Lily no me gustaba, ella sólo era... amable.
- Por fin las encuentro - Dijo Yazmín - vengan tenemos mesa - y con eso caminó, tomé a Venable de la mano y ella sonrió, al parecer le gustaba que yo hiciera éso.
POV Wilhemina
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