“Hola,” digo deteniendo mi caminata.

“¿Estás solo?”

“¿Estás calmada?”

Tuerce una leve pero muy leve sonrisa. “Por ahora sí. Raro verte aquí.”

“Estaba con Jamie.”

No puedo mencionar a Angelina, ambas no se agradan, supongo que Emily la odia.

“Estoy con unas amigas pero voy a tomar aire porque no me siento bien.”

“Me tengo que ir así que te acompaño.”

La rubia comienza a caminar y yo la sigo. Está usando un vestido gris y una camisa a cuadros. La camisa a cuadros me parece conocida, quizás estaba con ella cuando se la compró. Recuerdo lo que Angelina mencionó hace una hora atrás y tengo que estar de acuerdo con ella, Emily está muy delgada. Me pregunto si está enferma...

Salimos al frío de la noche, en la entrada del lugar hay unas pocas personas charlando o fumando. Emily y yo nos cruzamos de brazos al mismo tiempo.

“¿Por qué estás solo? ¿Recibiré la buena noticia que terminaste con Lucy?” Pregunta mientras se muerde las uñas.

“Estoy aquí por Jamie y nosotros aún estamos juntos. ¿Por qué estás tan tranquila?”

“Te dije que no me sentía bien,” responde llevándose una mano a la frente.

“¿Quieres vomitar?”

“Aún no,” sacude la cabeza con los ojos cerrados. “¿Te acuerdas...del perro que se comió el vomito de esa chica?” Susurra, aún con la mano sobre su frente.

No puedo evitar reírme ante el recuerdo. Emily se une a mí. En cosa de segundos nuestras risas se desvanecen en el frío aire y ambos apretamos los labios en una fina línea. Momento incómodo. Emily Manson frunce el ceño y sus ojos azules están echando chispas de recelo.

“Estás muy delgada,” comento antes de que ella pueda decir algo.

“Tú también, puedo notar que has perdido unos kilos.”

Emily es una profesional para evitar temas pero no podrá escaparse de este.

“¿Estás bien? ¿Debería hablar-?”

“Cállate, Harry. Estoy bien.”

“A veces eres una pésima mentirosa.”

“¡Esto no es tu maldito asunto!” Se queja alzando la voz. “¡Yo no me meto en tus asuntos así que no te metas en los míos!”

“Estás bromeando, ¿cierto? Eres una cínica. Molestaste a Lucinda, ella es mi asunto.”

Emily abre su boca para responder pero no lo hace. Baja la vista mientras está en una profunda reflexión. Frunce el ceño pero luego sonríe. Wow, eso fue rápido e inestable.

“¿Estás enfadado por algo?” Inquiere mientras saca un cigarro de su bolsillo. “Debido a tu silencio sé que estás enfadado con alguien. ¡Espera! ¿No me digas que yo soy la elegida para enfrentar tu rabia?”

Frunzo el ceño. “No.”

“A veces eres un pésimo mentiroso."

Encendemos nuestros cigarros y nos miramos en silencio. No hay expresión en el rostro de ninguno de los dos. Me pregunto que punto intentamos probar al estar aquí juntos sin abrir la boca pero con temas inconclusos y palabras sin decir.

"¿No es raro estar a esta distancia junto a la persona la cual te folló en cada manera posible? ¿No crees que es extraño?"

Hago una mueca. "No, no creo que sea extraño y no estaba pensando en eso."

Opposite worlds  »h.sWhere stories live. Discover now