Víctima Voluntaria.

Capitulo 14

advertencias para la violencia típica del canon, (asumida) muerte del personaje principal, violencia contra los animales (¡baozi estará bien, lo siento!)

(Consulte el final del capítulo para obtener más notas ).

CAPITULO

El Abismo Sin Fin existía en algún lugar entre el reino humano y el reino de los demonios, lleno de peligros salvajes a los que ningún cultivador podría sobrevivir. Normalmente, estaba sellado, manteniendo los reinos muy separados.

Pero aquí y ahora el Abismo sin fin está abierto.

Aquí y ahora acechaban extraños peligros.

Una ráfaga de viento caliente yin atraviesa el Abismo Sin Fin, atravesando el reino humano.

Uno por uno, los discípulos caen, dejando solo a tres personas en pie: Shen Qingqiu, Shang Qinghua y Luo Binghe.

Baozi gruñe, agachado. Ella siente algo. Algo que aún no se ha dado a conocer.

Shen Qingqiu aprieta los dientes, con la mano apoyada en la empuñadura de Xiu Ya.

Un hombre sale de la oscuridad, su rostro tan frío como el hielo. Un demonio, uno fuerte en eso, un sello azul ardiendo en su frente.

Shang Qinghua da un paso adelante. "¿Quién eres? ¿Por qué estás aquí?"

El demonio inclina la cabeza. La temperatura a su alrededor desciende mucho. Con un movimiento de la mano del demonio, Shang Qinghua sale volando, golpeando el suelo con fuerza y ​​antes de quedarse quieto.

Shen Qingqiu hace una pausa. Antes de que Shang Qinghua aterrizara, claramente había dejado escapar un grito de: "¡WTF!"

Se ocuparía de eso más tarde.

Shen Qingqiu desenvaina su espada y avanza, bloqueando el camino del demonio. "¿Es su excelencia un mediador del Reino Demonio?" pregunta con ironía.

El demonio ni siquiera lo sigue, condensa una masa de energía demoníaca y la lanza en su camino.

Ese tonto discípulo suyo bloquea el golpe, de pie ante Shen Qingqiu, todo su cuerpo temblando.

"Binghe, retírate", ordena Shen Qingqiu.

Pero Luo Binghe ni responde ni obedece. Se enfrenta al demonio, indiferente al poder del otro, aunque su frente estaba húmeda de sudor.

"¡Discípulo imprudente!" Shen Qingqiu ladra. "¿Desde cuándo el discípulo protege al maestro? Retírate, pequeña bestia."

El demonio inclina la cabeza, mirando a Luo Binghe con avidez. Shen Qingqiu conoce esa mirada: calculadora, codiciosa.

"Inmortal, pero no inmortal. Demoníaco, pero no demoníaco. Interesante", dice el demonio.

"¿Lo es?" Luo Binghe dice, tan arrogante para alguien tan joven.

Shen Qingqiu lo agarra por la parte de atrás de su túnica y lo arroja, fuera del campo de energía del demonio. "Retírate", ordena bruscamente. "¡Si no sigues esta orden, entonces ya no puedes llamarme tu Shizun!"

Shen Qingqiu se enfrenta al demonio, con Baozi de pie firmemente a su lado. "Tu oponente soy yo."

El demonio inclina la cabeza, mirando a Shen Qingqiu con desdén. "Qué oponente más lamentable eres", dice el demonio.

Shen Qingqiu se eriza y vuela hacia adelante, golpeando al demonio con Xiu Ya.

El demonio recibe su golpe con una jabalina de hielo. La cara del demonio es inexpresiva, ni siquiera se contrae con la fuerza detrás del golpe de Shen Qingqiu. "No eres interesante", dice el demonio simplemente.