C./ Pa' recordarte que nada ha cambiado
Que sigues siendo mi hermano, sabes que en mi mesa no falta tu plato.
Roma y Daniel se conocen desde que tienen memoria, ambos son confidentes uno del otro, se apoyan mutuamente en lo que quieren lograr, y des...
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-Te amo morocha. Más de lo que te imaginas- me besó tan profundamente que sentí en realidad qué nadie importaba más que nosotros dos en esta habitación.
Me sentí en paz después de mucho tiempo, esa paz de la que solo una persona te la puede dar. La paz que sólo Dani me da y me ofrece constantemente.
Y si, si el destino decía que teniamos que estar juntos, no lo sé. Por que no creo en eso del destino, pero se que somos muy idiotas al no darnos cuenta que en realidad teniamos que estar juntos.
Me empezó a besar apasionadamente, el beso se estaba subiendo de tono cada vez más, era algo que ambos necesitábamos. Aunque lo niegue, yo también necesitaba unirme a Daniel en todas las maneras posibles, no tenía absolutamente nada que perder, era al primer hombre que había amado, y al que le confiaría mi vida una y otra vez sin dudarlo.
Tendría muchos minis Dani corriendo por la casa, sería un caos. Si, eso está de sobra, pero sería con él, una y mil veces con él. Nadie más me hace falta.
-R-roma- dijo con la voz entrecortada, se separó de mí y me dió un beso en los labios, para acto seguido acunar mi rostro en sus manos- quiero que me digas que estás segura, no quiero hacer nada para presionarte. Jamás me lo perdonaría, sos lo más importante que tengo- le dí un beso. Uno lindo en el que transmitía seguridad.
Era muy tierna la forma en la que había formulado su pregunta. Había pura sinceridad en sus palabras, mirarlo así, tan vulnerable frente a mis ojos, tan él. Puro amor.
-Si amor, estoy segura- lo miré a los ojos mientras que acariciaba su mejilla para hacerle sentir la seguridad de mi decisión.
Y esa noche fuimos los dos. Nos convertimos en uno en todas las maneras posibles, Dani con toda su delicadeza me hizo sentir lo que verdaderamente era que te hagan el amor. Y si, vengo a desmentir que por más personas que se acuesten, va a llegar una con la que no va a ser sólo contacto físico y atracción, sino que va a haber amor.
Y si. A Dani fue la única persona que le entregue todo de mi y lo volvería a hacer. Una y mil veces. Y sin dudarlo.
Jeremías había puesto miles de barras en mi, demasiadas, hasta que llegue a tal punto de no querer llegar a nada más que unos besos. Me repugnaba el solo hecho de saber que tenía que volver a acostarme con él una y otra vez.
Pero obviamente todo cambió cuando él llegó, Dani. Derribó todas esas barreras puestas por mi, cerrandome a la completa idea del amor.
Por que con una simple sonrisa de él, borraba todo lo malo. Y si. Todo en esa canción es cierto. Cada palabra. Cada sentimiento. Todo.
