Atrapada en las rosas [ Kawaki y Tu ]

[ 02 ]

Cumpleaños...

Narra Kawaki: No sabía que hacer... Boruto ya se había ido, y Akane aun no salía del cuarto. En ese momento escuche como si alguien tumbara con fuerza algún objeto y como un espejo se rompía. Entre al cuarto de golpe... Cubriendo mis ojos por si Akane estaba sin ropa. Cuando sentí la mirada de Akane y dijo con una voz rota sin energía: Tranquilo Kawaki, estoy con ropa... No tienes porque cubrirte. Me quite mis manos de los ojos y al verla sentí un vació en mi interior. Su cabello estaba desaliñado, sus ojos vacíos como si no tuviera alma, las ojeras era lo que más resaltaba en la cara de Akane, las marcas de que había estado llorando... 

Akane estaba destruida... Cuando empecé a fijarme mejor su cuello estaba lleno de chupones, sus piernas, brazos, sus muñecas estaban marcadas, y al ver el cuarto estaba la ropa de Akane rota. Su vestido roto a la mitad, su brasier estaba al pie de la cama, y Akane solo llevaba una sabana en forma de Toalla cubriéndola. Yo dije: Akane, ¿Te sientes bien?. Akane me miro y contesto tirada en un rincón: No... En lo más mínimos... Me siento un asco, sucia... Ni siquiera dándome una ducha me siento... Limpia. Me quite mi chaqueta de guarda espalda y se la di para que se la colocara. El brillo de los ojos de Akane parecía volver al ponerse la chaqueta, y dijo: Gracias, Kawaki. Akane camino a su cama y dijo: No debiste quedarte esperando... Camine a su lado y dije: Soy su guardaespaldas no podía dejarla botada. Akane sonrió y dice: Gracias Kawaki, pero deberías irte a dormir... Yo estaré bien. Mire a Akane y dije: Muy bien, descanse señorita. Ahora me encontraba en mi cuarto tratando de consolar el sueño. Pero no podía... Solo pensar en el cuerpo de Akane y como había roto el espejo, como su ropa estaba, no podía consolar el sueño. Más que sabía que ella tendría que casarse con el... Mi sangre ardía de saber esto. 

(Narra el Narrador): A la mañana siguiente... Kawaki se levanto y al llegar al cuarto de Akane esta no estaba dormida estaba lista pero aun con su saco puesto. Kawaki la miro algo sonrojado y saludo: Buenos días señorita Akane. Akane dice: Buenos días. Kawaki dice: Su hermana la estaba buscando. Akane dice: Sarada... Sarada entró al cuarto y saludo a su hermana. Akane dice fingiendo que a noche no le paso nada: Sarada... ¿Como estas?. Sarada la miro y dijo: Y-yo estoy bien... No tienes de que preocuparte. ¿Tu como estas?.  Akane dice: Cla-claro, y-yo estoy bien. Sarada quito el cabello del cuello de su hermana y al ver sus chupones dice: ¿Que te sucedió Akane?. Akane dice: N-no te preocupes *Se coloca su mano en el cuello* No es nada. Sarada tomo el brazo de su hermana, levanto las mangas y vio los chupones, y dijo: Esto no es nada... Estos son chupones... Akane dice: No te preocupes Sarada... Sarada dice: ¡No digas esas cosas!. ¡Claro que me preocupo!. ¡Tu cuerpo esta lleno de chupones, golpes... Akane habló seria: Sarada yo estoy bien nada que no pueda solucionar sola!. Sarada dice: No digas eso... No puedes... Solucionarlo sola... Akane miro hacia otro lado y dijo: Si... Y deberías irte tienes cosas que hacer no?. Sarada no la miro y dijo: Claro, te veré después. Akane dice: Bien. Sarada salió del cuarto y Akane se quedo en cama el resto del día sin salir o comer algo. Al día siguiente ya parecía más animada incluso paso el día entero con Sarada, hablando, ayudándole en sus tareas y escuchando lo que pensaba...