SeokJin dormia plácidamente en su cama, la habitación estaba oscura pero por la ventana entraba la brillante luz lunar... y también un chico alto y pelinegro.
JungKook cerró la ventana luego de entrar y se centró en el pequeño bulto bajo las cobijas de la pequeña cama con sabanas de un tono rosa pastel.
Se quitó la chaqueta, luego su camisa quedando solo en su pantalón un poco suelto.
Se metió dentro de la cama y empujó el cuerpo del menor para hacer espacio. Este balbuceo algo inentendible y se movió para el costado.
Pero eso no fue suficiente.
JungKook suspiró y agarró el cuerpo de Jin para dejarlo sobre el suyo, se acomodó mejor y cayó dormido con su pequeño encima.
A la mañana siguiente eran las 07:00 en punto, la hora en que el padre de Jin iba a despertarlo, se dirigió a la habitación de su hijo y abrió la puerta. OK... esto no se lo esperaba.
Recuerda haber revisado la habitación de Seok a medianoche para verificar que todo esté bien.
Pero no recordaba haber visto a semejante hombre bajo el cuerpo de Jin, dormia plácidamente con una mano en la espalda del menor y la otra sobre el trasero cubierto por el diminuto bóxer que llevaba puesto.
Valla que estaban disfrutando de su sueño...
