Capítulo 20

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Después de que los más jóvenes salieran de la ciudad y los mayores buscaran otra de las partes de su querido amigo, Wei Wuxian se dirigió hasta la casa ataúd, donde yacía el cuerpo de Xiao Xingchen. Al cruzar la puerta pudo ver la figura de Song Lan, cabizbajo y, si aun pudiera, posiblemente las lágrimas correrían libremente por sus mejillas.

Lan Wangji recorrió la habitación dando una triste mirada, pasando un poco de saliva por su garganta de forma inconsciente y una extraña sensación de vacío se asentó en su interior. Después de unos minutos más de silencio, Wei Wuxian finalmente se decidió hablar.

- Daozhang Song.

Song Lan dirigió su mirada hacia el otro, asintiendo levemente, dando entender que lo estaba escuchando.

Wei Wuxian extendió sus manos dejando ver dos  bolsas espirituales, con las almas a la pequeña A-Qing y Xiao Xingchen. Song  Lan las observó por un momento antes de tomarlas cuidado entre sus manos. Wei Wuxian guardó silencio por un momento, pensando lo que debería decir, y finalmente preguntó.

- Daozhang Song  ¿Qué hará ahora?

Song Lan miró a la pareja por un momento antes de dirigir su vista al suelo, la punta de su espada trazó su mensaje.

"Cremar el cuerpo, cuidar del alma".

Wei Wuxian asintió levemente.

- Afortunadamente, sin su cuerpo y sólo quedando su alma pura, sí es bien cuidada puede que regrese algún día.

El silencio volvió a reinar por unos instantes, la atmósfera que rodeaba el lugar era realmente abrumadora, hasta cierto punto se volvió demaciado exasperante para la pareja.

- ¿Y después de eso qué hará?

Song Lan volvió a escribir.

"Viajar junto a Xingchen, exorcizar seres malignos y...  Cuando despierte decirle al fin 'lo siento no fue tu culpa'."

Los cultivadores demoníacos asintieron levemente. Lan Wangji avanzó un paso, su cabeza se inclinó levemente y sus manos entregaron la espada de Xiao Xingchen. Antes de tomarla, los dedos de Song Lan pasaron por los patrones de escarcha; hizo una leve reverencia como agradecimiento y tomó a Shanghua, mirándola con tristeza.

Song Lan partió, poco después la pareja de cultivadores siguió sus pasos. La silueta del cadáver aun era visible a las afueras de la ciudad, y algunos de los jóvenes que esperaban a sus mayores lo veian fijamente.

- Xiao Xingchen, la brillante luna y suave brisa. Song Zichen, la distante nieve y fría escarcha.

- Me pregunto si volverán a encontrarse algún día...

Los jovenes se lamentaban del triste desenlace de la vida de Xiao Xingchen y Song Lan. Lan Wangji susurró algo inetendible para todos a execión de su pareja,"Alivio". Sin embargo,  no preguntó nada y simplemete abrazó el brazo de su esposo. Sus ojos siguieron hacia delante encontrándose con un grupo de jóvenes, algunos de ellos están quemando papel moneda que habían recogido de la ciudad en honor a Xiao Xingchen y A-Qing; algunos otros estaban lamentándose y otros tantos no paraban de maldecir a Xue Yang por lo bajo; entre todos, tres pálido jóvenes se destacaron.

Sin esperar mucho la pareja fue hacia ellos, ambos analizaron a los menores buscando alguna herida o daño, simplemente una mirada perdida.

Usualmente Wei Wuxian habría hecho una broma para animar a los jóvenes, pero en este momento, ni siquiera él tenía palabras para describir lo que sentía.

Los jóvenes de Yiling se veían realmente palidos, dando una impresión enfermisa. Definitivamente el hecho de encontrarse con Xue Yang no fue una agradable sorpresa, y los asuntos que debían atender con sus padres eran menos agradables. Antes de que los mayores salieran de la ciudad habían discutido sobre eso, no hablarían, no ahora.

- Madre, sería mejor que nos quedáramos en una posada, deberíamos descansar un poco.

Wei Wuxian no habló, simplemente asintió en respuesta.

Los mayores empezaron a caminar, y antes que se dieran cuenta, todos los jóvenes de las sectas los empezaron a seguir. Ambos solo miraron de reojo y Wei Wuxian sonrió levemente; pensó que al igual que ellos, sólo querían descansar en una posada antes de partir a sus hogares.

A pesar del ambiente desolador del que acaban de salir el camino hacia la posada más cercana no fue silencioso ni lugubre. Algunos de los jóvenes seguían hablando, incluso haciendo bromas o jugando entre ellos; mirando de reojo, Wei Wuxian pudo notar como sus hijos se empezaron a relajar un poco, su animo mejoró  y empezaban a hablar con algunos de los jóvenes. Verlos así le hacía sentir satisfecho; sus hijos, Lan Jingy, Oyuang Zichen y ocacionalmentel Jin Ling hablaban animadamente, jugando un poco y haciendo que los tres pertenecientes a Yiling sintieran como la presión en su corazón disminuía.

Al llegar a la posada, la atmosfera melancolica y agobiante había sido cambiada por una más amena. Cuando los mayores empezaron a subir las escaleras siguiendo al mozo, los jovenes fueron detras de ellos, hasta que la voz de Lan Sizhui los interrumpió.

- No creo que sea buena idea, todos los jóvenes deberíamos quedarnos abajo.

Wei Wuxian rió por lo bajo, finalmente cortando la atención que había cargado todo el camino.

- A-Yuan tiene razón, los adultos debemos descansar a solas.

Gran parte de los jóvenes dieron marcha atrás, simplemente ignorando el comentario o desviaron la mirada, levemente avergonzados mientras veían como Wei Wuxian se colgaba del brazo de Lan Wangji.

Las risas nerviosas de los hermanos de Yiling sonaron por lo bajo. Los mayores subieron las escaleras hasta su habitación, Wei Wuxian sonrió levemente antes de subir junto a su esposo.

Cuando Wei Wuxian finalmente entró a la habitación se dejó caer sobre la cama, un pequeño quejido escapó de sus labios y cerró sus ojos.

Lan Wangji se acercó a él, arrodillándose lado de la cama y acariciando suavemente la cabeza de su esposo, Wei Wuxian simplemente le dio una sonrisa cansada.

- Utilizaste empatía.

No sonaba como una pregunta, más bien era una afirmación. Wei Wuxian sabiendo que no podría mentir asintió levemente; Lan Wangji le había dicho inumerables veces que no debía seguir utilizando sus trucos, su cuerpo ya no se lo podría permitir.

- No tienes porque preocuparte todo el tiempo, sólo estoy un poco cansado.

La triste mirada de los ojos dorados se clavó sobre él. Lan Wangji debe admitir que a veces se preocupaba demás por su pareja, sin embargo no lo podía evitar, el cultivo demoníaco era sumamente desgastante para la mente y el cuerpo de una persona, mucho más si no tenía una forma interna de controlarlo. 

Wei Wuxian alejó la mano de su esposo de su cabeza, reincorporándose con calma sobre la cama, sonriendo hacia Lan Wangji.

- Lan Zhan, porque no descansas un poco. Debes estar agotado.

Lan Wangji recuperó su postura, dio una suave caricia a la cabeza de su esposo y negó suavemente con su cabeza antes de hablar

- Volveré pronto.

Wei Wuxian solo hizo un leve puchero antes de que Lan Wangji saliera. Volvió a recostarse y, poniendo un poco más de atención, podía escuchar algunas voces en la planta baja, probablemente algunos de los jóvenes estubieran discutiendo.

Rompiendo las reglas [ WangXian ]Where stories live. Discover now