Vas a caer por mí || Levi Y Tú

18

Arima

—Me estas diciendo... que Levi se puso nervioso... ¿por mi? —pregunté con ilusión e incredulidad.

—¿Tengo cara de mentirosa?

—No puedo creerlo. Entonces si tiene sentimientos... ¡si reacciona a lo que hago por él!

—__(tn) yo cr-

—¡No es posible! ¡estoy a un paso cada vez más cerca de él! ¡debo ir a verle! Debe estar tan confundido... ¡mi pobre inhumano!

—Puede que parezca que no tiene sentimientos pero te aseguro que es humano.

—¡Hange! ¡gracias! —dije por última vez para largarme de ahí e ir directo con Levi.

No puedo creer que esto esté pasando. ¡Lo logré! Obtuve reacciones por parte de este. Pero... ¿por qué ahora?

—¡Levi! —dije al abrir la puerta de par en par con una increíble sonrisa, observandole. Me recompuse— Quiero decir, capitán Levi. Han llegado a mis oídos que ayer no se encontraba bien.

—La maldita cuatro ojo metiéndose donde no debe —suspiró.— ¿qué quieres? ¿Burlarte?

<<Oh, eso no lo había pensado...>>

Sonreí de mejilla a mejilla.

—Bueno, ya que lo mencionas... —me acerqué con cuidado a su escritorio y deslicé mi dedo en la madera— ¿Te encuentras bien? Quiero decir, para que el gran Ackerman reaccione como Hange me ha dicho algo te debió de haber pasado... ¿sucedió algo... tal vez?

Levi seguía mantenido su mirada de pocos amigos fija en mí.

—No estoy para juegos.

—¡Yo menos! Dime, ¿que recordaste?

—V-vete.

—¡Ahora te pones nervioso! ¡dime, dime! ¿Algo que yo hice o dije? ¿El beso? ¡tiene que ser el beso! ¿Nuestra cita en el techo? ¿O cuando me salvaste? ¡dime cuál de tantas cosas que hice y dije por ti! ¿Cuando te dije que estaríamos juntos?

—¡Ya basta! Deja de decir estas cosas tan a la... ligera. Me molesta.

Corrió la mirada con vergüenza.

Ensanche aún más mi sonrisa diabólica.

—Te molesta el hecho de que no sabes como accionar a lo que digo. Y te molesta el hecho de que tal vez, ya tengo efecto en ti —toqué su pecho con mi dedo índice un segundo y luego lo aparté.—. Puedes confiar en mí.

Intensos segundos de intercambios de miradas.

Intensos segundos en que él, supongo, se debatía consigo mismo en abrir la boca o no.

—Yo... oí tu conversación con Zoe.

—¿Cuál de todas? ¿Don- Oh... —dije al ver su mirada.

Bueno... tengo que decir algo ahora, ¿cierto?

Inspiré hondo.

—Bueno... es... cierto. Todo lo que oíste lo pienso de verdad.

—Lo sé. No creo que eres tan perspectiva de notar mi presencia y empezar a hablar bien de mi sabiendo que estoy oyendo.

—No sé si tomarlo como un halago o una ofensa sinceramente. Es confuso.

Levi dejó escapar una corta risa negando.

—En fin. Nos casaremos y tendremos muchos hijos. Bueno no, muchos hijos no, solo uno o dos. Nada más.

—¿N-no crees que te estás adelantando?

—¿Por qué? Te gusto, ¿o no?

Su cara enrojeció.

Reí a carcajadas. Es gracioso verle reaccionar tan... inocente por asi decirlo. No tiene experiencia alguna.

—¿Nunca nadie te ha dicho todo lo que yo te digo? ¿No eres popular con las chicas?

—Eso no es de tu incumbencia. Ahora, __(tn), sal de mi despacho por favor. Necesito estar tranquilo.

—Está bien, está bien. Pero te estás tardando en enamorarte de mi —avisé antes de irme y cerrar la puerta.

Me detuve de repente. Una vaga pero excelente idea pasó por mi cerebro.

—¿Qué pasa? ¿Por que-

—Ahora sí me voy —susurré con diversión en sus labios y me fui más rápido que el viento mismo antes de que Levi me asesine por besarle otra vez.

Segunda vez y sigo con vida.

Es buena señal definitivamente.

•••
¡hola y adiós!