「 Mi rival favorito 」♡ミ(ᴘɪᴘᴇᴘᴜɴᴋ x ᴄʀʏ)

C a p í t u l o 2

ー¿Crees que lo que estamos haciendo está bien? Ah...

ーMm... Desde que tus papás vinieron aquí estuvieron mal. Pero... Ah... Si rompimos una ley, no nos dañara romper otra...

ーAh... Mm... Ahí...

ー¿Se siente bien?

ーSí...

ーNgh... Creo que...

ー¡Espera!

ー¿Qué sucede?

ーEs que... Tienes veinte años...

ー¿Qué?

ーNo podemos... Esto no está bien.

ーPero tengo quince años.

ー¿Quince?

Cry se levantó de golpe con la respiración agitada y sudor frío corriendo por su rostro.

Levantó su cobija mientras se ruborizaba y miró su entrepierna.

ーAh... Pubertad.

Rió suavemente mientras se levantaba de la cama y pensaba en el sueño que acababa de tener; era Iván, su amigo de veinte años. Eso había sido extrañamente placentero. Y no era la primera vez que soñaba eso. Pero eran sueños, no podían decir la verdad, ¿no? ¿Entonces por qué siempre despertaba sintiendo cosquillas ahí abajo?

A veces Cry deseaba que el tiempo avanzara rápido para ver qué sucedía entre ellos dos.

Solía tener fantasías y sueños en donde aparecía Iván, pero constantemente se repetía que él solo era un amigo y nada más.

No quería volver la situación más incómoda de lo que ya era, así que solo actuaba como si esos pensamientos nunca hubieran existido. Al fin y al cabo, Iván ya estaba comprometido.

ーBuenos días ーdijo Cry a sus papás mientras bajaba los últimos peldaños.

Su mamá estaba terminando de hacer el desayuno y su papá se encontraba poniendo la mesa. Ambos le devolvieron el saludo a su hijo y después de un tiempo los tres se encontraban sentados.

Cry comenzó a comer el tocino y los hot cakes que habían en su plato.

ーCariño, hay algo de lo que te quiero hablar ーcomentó su mamá.

Cry temió que fuera sobre sus sueños húmedos pero decidió escuchar.

ー¿Qué pasa?

ーNo sé si esto te vaya a afectar pero tu papá y yo hemos decidido que sería mejor que te dejaras de juntar con ese chico Iván.

El ojiazul se detuvo por unos segundos pero reanudó la acción que estaba haciendo para simular que no le había afectado lo que le dijo su mamá.

ー¿Por qué quieren que me deje de juntar con él?

ーCreemos que su relación es un poco peligrosa ーdijo el papáー. Sólo te estamos cuidando.

ーPero no te preocupes, cariño. Puedes estar con él siempre y cuando nosotros estemos presentes. Además, solo será por tres años. Ya verás que el tiempo se pasa volando.

Cry soltó sus cubiertos.

ーÉl no es un violador.

ー¡Por supuesto que no! Pero, ya sabes, él ya es un adulto que va en universidad y tú eres un adolescente. Estamos en un país extranjero y queremos evitarnos problemas.

ー¡Pero él ya tiene una novia! No lo entiendo. ¿Solo nos podremos ver en una reunión con su familia?

La señora asintió con una mueca triste en su rostro.

Cry se hizo para atrás en su silla, sintiendo cómo le comenzaban a arder sus ojos.

ー¿Y qué se supone que le voy a decir? ¿Que porque ustedes pensaron que podría tocarme me dejé de juntar con él? ¿Y que a pesar de conocerlo desde bebé no confían en él?

ーCariño, hay cosas que no entiendes. No siempre lo que uno aparenta es lo que parece. Pero dejando eso de lado, solo queremos evitarnos problemas...

ーSólo dile que la escuela te ha estado estresando con mucha tarea ーsentenció el papá.

Cry se levantó bruscamente de su asiento y subió a su habitación.

Se envolvió en sus sábanas y dejó que las lágrimas mojaran su almohada mientras el chico mordia su labio.

Por tanto tiempo había deseado que los días pasaran rápido para llegar a un futuro un poco lejano y ver cómo era su relación con Iván. Pero ahora la única afirmación que tenía era a su mamá diciendo que esos tres años de espera pasarían rápido. Y ni siquiera sería al lado de Iván.

Quería gritar, huir, romper cosas y decirle a sus papás que eran unos estúpidos.

Pero no lo hizo porque en el fondo sabía que no podía hacerlo. No podía desobedecer a sus papás por más que quisiera.

Pero no sabía qué sucedería en esos tres años. Y eso le aterraba.