𝐏𝐫𝐢𝐦𝐞𝐫𝐚 𝐜𝐢𝐭𝐚

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Primera cita



Harry:

Fueron a un museo en el mundo muggle; Por sus tíos, Harry no pudo salir muchas veces fuera del zoológico y algunas dulcerías a las que su primo demandaba ir, entonces a ambos les pareció una gran idea ir a Londres muggle durante las vacaciones de Navidad (donde ambos decidieron quedarse en el castillo) para admirar el arte que ahí se encontraba. Al final, regresaron al castillo tarde en la noche, cosa que Dumbledore excusó entendiendo perfectamente a Harry.


Ron:

Hogsmeade; Si algo sabemos sobre este chico, es que no es muy creativo para estas cosas por lo que solo te llevó a la tienda de té de Madame Tudipié, en Hogsmeade. Es un lugar bastante conocido entre las parejas de Hogwarts, pero ambos sabían bien que no se iban a llenar con un par de galletas y tazas de té. Terminaron yendo a las Tres Escobas por cerveza de mantequilla, ahí aprendieron que no eran convencionales y no necesitaban de un lugar estéticamente agradable para pasarla bien, solo necesitaban al otro. 


❥Draco:

Un restaurante caro; Claro, él estaba intentando cambiar pero esos actos de presumir su dinero estaban arraigados y tendrían que trabajar más en ese aspecto. La decoración del lugar era elegante, candelabros de cristal, telas verdes con dorados adornaban el salón. No era muy tu estilo, pero ambos terminaron teniendo una velada agradable dentro de lo que cabe. De verdad lo estaba intentando, cambiar, no solo por ti pero por él también. Más tarde, caminaron por el castillo mientras platicaban sobre todo. Tal vez esa segunda oportunidad estaba funcionando.


Neville:

Un picnic en los jardines de la escuela; Querían tener algo lindo, simple y sin meterse en problemas, esta fue la opción perfecta. Vieron el atardecer recostados en la pequeña manta que Neville había preparado para ambos, o al menos lo que aún se podía distinguir que no tapaba el edificio. De cualquier manera, la luz naranja alumbró sus rostros mientras comían y charlaban entre risas. No podías pedir algo mejor.


Fred: 

Te llevó a nadar al lago negro a media noche; Supo que el lugar de su primer beso de alguna manera sería especial para ambos, y hacerlo en la noche solo era más emocionante, agregando el hecho de que Snape podría verlos en cualquier momento. Logró conectar a la señal muggle un radio que le había dado su papá. Al final de la noche, con la música comenzaron a bailar lentamente, importándoles poco que tan empapados con el agua del lago estaban.


George:

Explorar los túneles del mapa merodeador; Ambos eran almas aventureras, y les pareció una idea genial mostrarte los pasadizos del castillo. Golpearon la estatua de la bruja tuerta en el tercer piso y al decir "Dissendium" abrió a un pasillo hasta el sótano de Honeydukes, donde compraron distintos dulces para ambos. Después, se dirigieron al castillo, llegando a la sala de menesteres donde se recostaron frente a la chimenea mientras comían todo lo que compraron a charlar sobre distintas cosas. 


Cedric: 

Un paseo bajo las estrellas; De nuevo, el señor romántico no se contuvo. Con el conocimiento que ambos poseían en astronomía y un telescopio que la profesora Aurora le prestó, logro tener una romántica velada en las áreas verdes aledañas al castillo. Esa noche, guardó un poco de comida de la cena y la llevó a su cita. Observaron constelaciones mientras comían Bollos de Bath y Budín de Yorkshore toda la noche. Bueno, por supuesto hasta que tuvieron que devolver el telescopio a la torre de astronomía y regresar a los dormitorios.


Oliver:

Nada relacionado con Quidditch, lo mantuvo simple y te llevó por cervezas de mantequilla a Las Tres Escobas; Pasaron todo el sábado permitido por la escuela entre risas, charlando sobre sus familias, Quidditch, las clases, profesores, como Harry siempre recibía ayuda de todos y si no fuera por eso hubiera muerto hace tiempo, distintos temas en general. Al final de la noche regresaron al castillo donde cenaron juntos.










➦Harry Potter Preferences & One ShotsWhere stories live. Discover now