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— Por favor Jennie. — Insistió la menor mientras jalaba mi brazo.
— No quiero. — Dije caminando por toda la plaza junto a la chica.
— Vamos, van a ir Rosé y Jisoo también. -
— Pero es que no quiero, prefiero estar en mi casa. -
— Oh, vamos, Jisoo descubrió un bar muy divertido.
Me quedé callada pensándolo mejor.
>> ¿Debía ir? <<
— Vamos Nini, la juventud no es para siempre.
Lisa tiene razón, mis amigas y yo no íbamos a ser jóvenes por siempre, de seguro me arrepentiría después.
— Está bien, iré con ustedes. -
El rostro de la de pelo corto se iluminó con alegría al escuchar mi respuesta.
— ¡Si! — Celebró sacándome una sonrisa. — Vamos, hay que ir a nuestras casas a arreglarnos, pero primero pasemos por la mía a sacar ropa. —
Me jaló del brazo sacándome de la grande plaza a la fuerza.
(...)
Nos adentramos a la pequeña casa.
— ¿Mamá? — Preguntó con un tono de voz alto con la intención de que se pudiera escuchar por la casa. — ¿Papá? —
— De seguro están trabajando. — Habló la menor. — ¿Qué hay en la televisión? — Preguntó dando un gran salto hacía el floreado de la sala.
Tomó el control prendiendo el aparato cuadrado.
— Mira Jennie, están dando E.T, me encanta esa película.
Estaba dejando algunas cosas que llevaba puesto.
— Salió el año pasado ¿No es verdad? — Hablé mientras me sentaba al lado de mi amiga poniéndole atención a la película.
— Si, es muy buena.
Nos quedamos unos minutos olvidando por completo el por qué habíamos venido.
— Espera...No vinimos aquí a ver E.T, tenemos que cambiarnos para salir hoy.
— Es verdad, primero cámbiate tú y yo te doy mi opinión.
— Claro. — Nos dirigimos con pasos rápidos hacía mi habitación.
Lisa llevaba una gran maleta con la ropa que se probaría para salir en la noche.
Al momento de entrar al cuarto, la menor de las dos se adentró al baño acompañada de su maleta.
Esperé unos minutos a que por fin saliera.
Al momento de salir, tenía puesto un polo de color verde fosforescente y otro polo transparente pero este era de color azul, un short rojo pequeño y abajo unas medias largas rosadas.
— Definitivamente no. — Fue lo único que respondí.
Ella entendió el mensaje y se devolvió al baño.
Unos minutos más de espera y escuché la puerta abrirse de nuevo.
Está vez salió con unos jeans apretados en la parte de arriba y muy flojo en la parte de abajo, una camisa blanca con un bolsillo de color azul que se metía en sus jeans y zapatillas de toda la vida.
— Ese está mucho mejor que el anterior.
— Ya, me quedó con este, ahora es tu turno.
Pasaron unos minutos y por fin había salido a mostrarle lo que había elegido.
Salí con un vestido sin mangas de color rosa claro con un listón que adornaba la parte superior del pequeño vestido, una casaca floreada alrededor de mi cintura y por último una vincha del mismo color que el vestido que sujetaba mi cabello.
— Ese atuendo te queda absolutamente perfecto.
— Gracias, gracias.
— ¿Qué hora es? — Dirigió su vista a su muñeca en donde se encontraba un reloj dorado. — 6:13 — Se respondió a sí misma.
— ¿A qué hora debemos estar ahí?
— A las 6:30, será mejor que nos vayamos de una vez.
(...)
Nos adentramos en aquel lugar inundado de risas de varias personas.
— ¡Jennie! ¡Si viniste! — Gritó a lo lejos una peli roja.
Llevaba puesto un polo que le llegaba por los muslos con diseño de su banda favorita "Queen", un short negro debajo del grande atuendo, unas botas brillantes blancas que terminaba en las rodillas y su cabello largo y despeinado que estaba de moda.
— Tengo que aprovechar la juventud Rosé.
— Es verdad, me alegro qué hayan venido, Jisoo está sentada cuidando nuestra mesa.
Seguimos a Rosé hasta que llegamos a la mesa antes mencionada que estaba siendo protegida por la peli negra.
— Esta mesa tiene la mejor vista al escenario del lugar. — Habló Rosé.
— ¡Jisoo! — Grité con emoción corriendo a abrazarla.
— ¡Jennie! Que alegría verte, siéntense.
Se podía ver como las personas bailaban por la banda que se estaba presentando en ese momento.
— ¿Qué has estado haciendo estos días que no has podido venir? — Preguntó la peli roja. —
— En verdad nada, solo que prefería estar en mi casa. — Respondí con sinceridad.
— ¡Qué mala!
— No soy mala Jisoo, poco social, tal vez...
Las cuatro reímos divertidas, hasta que la música había terminado. Todos se estaban sentando en sus respectivas mesas cansados por bailar tanto.
'Cause I-I-I'm in the stars tonight So watch me bring the fire and set the night alight
Las risas no faltaban en la mesa, hasta que mi vista se desvió al escenario con curiosidad de quien era el dueño de la voz.
Shoes on, get up in the morn' Cup of milk, let's rock and roll King Kong, kick the drum Rolling on like a Rolling Stone
Sobre el escenario se encontraba un chico rubio con un polo azul fuerte, traía puesto varios accesorios como un collar plateado, varias pulseras que adornaban sus muñecas y lentes grandes blancos.
