🟤O2🟤

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Han JiSung era libre, había sido abandonado desde que era una cría, y aunque suene doloroso era algo que le gustaba, le gustaba corretear por el bosque, le gustaba enterrar sus bellotas aunque a veces olvidaba donde las había dejado, le gustaba buscar su comida y sobre todo le gustaba la bella amistad que tenía con su mejor amigo, JeongIn su conejo cabeza de león favorito, aunque... Tenía varios amigos de diferentes especies, nadie ocuparía el rincón de su menor. Pero claro, no significa que no sea atento y tímido como comúnmente los roedores eran, lo era... Demasiado.

Después de despedirse de su rubio amigo y verlo entrar a su madriguera, decidió recorrer el bosque un poco más en busca de comida, por desgracia se había alejado demasiado y perdió su regreso a su hogar, al notar la noche se apresuró en improvisar un hogar para al día siguiente regresar a su anhelado árbol, no contó con que varios depredadores estén por aquella zona, así que trato de ocultar su aroma y refugiarse en aquel árbol, para su mala suerte no funcionó.

¡Era el fin de JiSung! ¡Iba a ser devorado por un perro pulgoso!

Y mentiría, pero se sorprendio cuando este lo cuido con tanto cariño, pero no bajaba la guardia, tenía miedo... Y se sentía triste, no volvería a ver su Innie, ni a su amigo el gato, Felix que había intentando comerlo cuando se conocieron, ni a su amiga ardilla Sana... Su dulce amiga, nada... Era el fin.

Su respiración se calmó cuando dejó de sentir tantos aromas a sólo el del lobo que lo quería comer y para colmo lo había llevado contra su voluntad a un lugar desconocido. Su nariz se asomó entre la apertura de la ropa olisqueando alrededor, al no sentirse en total peligro su rostro se asomó mirando la casa.

Casa.

Chilló e intentó saltar de aquella pequeña cárcel de tela, siendo atrapado por las manos del castaño.

~ ¡No, no, no! ¡No, ardilla! No te haré daño - acarició la espalda del omega.- Es temporada de caza, si te dejo ir probablemente no sobrevivas.

Sung lo miro ofendido, ¿Quién se creía ese alfa? Había sobrevivido una vida afuera, podía contra una noche, y esa valentía se esfumó al escuchar algunos aullidos de los lobos vecinos. Logró escabullirse entre la manga de la ropa del mayor cubriendo sus ojitos y con su colita protejer su cuerpo.

El alfa fue hasta la cocina y busco algunos frutos secos para poder alimentar al omega asustadizo. Que al detectar el aroma salió de su escondite y fue por aquellas delicias, ¡Habían bellotas! Y muchas variedades. MinHo se alejó dejando a la ardilla en la cocina con la comida que había conseguido buscando una pequeña caja la cual lleno con prendas viejas para un pequeño lugar de descanso.

Regreso notando que aquella pequeña peluda seguía comiendo y con cuidado le mostró la caja.

~Yo soy Lee MinHo, un lobo... Pero no te haré daño - repitió esperando que eso calme al menor- No es lo más cómodo, pero podrás acomodarlo como quieras mientras estás aquí.

La ardilla miró fijamente al mayor quien dejó la caja frente al roedor, el pequeño cuerpo marrón enseguida se acomodó y se encargó de dejar algunas de las semillas que le habían entregado. Sin mayor alboroto guió la caja hasta su habitación y la dejó en su mesita de noche, MinHo sabía que JiSung no iba a cambiar a su forma humana por el temor que sentía, pero de todos modos se prometió a sí mismo cuidar del pequeño.

 Sin mayor alboroto guió la caja hasta su habitación y la dejó en su mesita de noche, MinHo sabía que JiSung no iba a cambiar a su forma humana por el temor que sentía, pero de todos modos se prometió a sí mismo cuidar del pequeño

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~ ¡No! Deja eso, ardilla... - JiSung miraba neutro al lobo. Al parecer la palabra favorita de aquel perro gigante era "No"- Ven, conseguí algunas nueces.

Una semana había pasado, JiSung había cambiado una vez y fue cuando el tal Lee MinHo no estaba, se mantenía en su forma de ardilla a pesar de ya no estar del todo asustado, sin embargo no bajaba la guardia, en cualquier momento podría ser devorado por esa cosa. Al segundo día de llegar había intentado huir, el ser pequeño y muy revoltoso le era una ventaja, sin embargo apenas llegó al patio trasero un rugido se escuchó no muy lejos, lo que hizo que volviera a la velocidad de la luz al cuarto del castaño mayor, entre chillidos corrió de regreso despertando a Lee al sentirlo esconderse en su playera acomodándose en su pecho. Si, para el lobo había sido algo gracioso al verlo correr por toda la habitación demasiado asustado, sin embargo se encargó de consolarlo...

También se tomó la libertad de hacer un nuevo hogar suplente en el pequeño árbol que tenía el alfa en su patio trasero, por suerte los lobos eran muy territoriales y no eran de visitar los hogares de otras personas, así que el omega paseaba por toda el área en total libertad; también había sido una tortura para el dueño del hogar el tener a aquel travieso roedor... Había dañado varias cosas con sus afilados dientes, entre ellas: muebles, ropa, utensilios, adornos, etc. Y éste incluso había tenido la suerte de ser mordido cuando intentó acariciarle la cabeza. Una bandita blanca rodeaba el dedo índice del mayor.

La pequeña ardilla iba abrazada del brazo derecho del mayor hasta llegar a la cocina en donde se acomodó mientras con sus patitas se limpiaba su boca y su nariz, fue interrumpido al ver el montón de comida que habían dejado frente a él.

~ Necesito que te quedes arriba y no salgas por unas horas, hoy mi padre vendrá a cenar... Y si te descubre eres ardilla muerta - advirtió MinHo con un tono amenazante- Yo te dire cuándo salir. - señaló y la ardilla estiró su patita hasta el dedo cerrando el trato.

MinHo siguió guardando lo que había comprado, y también ordenó un poco el lugar para la cena con su padre y su hermano menor, su madre había fallecido hace unos pocos años atrás por una terrible enfermedad... Era triste que esa situación en lugar de unirlos los había separado. Además de que debido a eso, su padre necesitaba pronto dejar su liderazgo y que MinHo empiece con su mando, sin embargo... El alfa aún no tenía omega, así que todavía no ponerse a cargo.

JiSung, aunque agradecía los cuidados y la preocupación del mayor, extrañaba estar afuera y extrañaba no poder ver a su conejo, poco a poco iba entendiendo que no podía salir si no quería ser la cena o el almuerzo de alguien, así que -aunque no lo mencione- Se sentía muy agradecido con Lee.

La dulce ardilla saltó a la mano extendida y recorrió el brazo hasta llegar al hombro del alfa.

~ No hagas ningún desorden, ni dañes nada - pidió el humano caminando a su dormitorio.- Si quieres... Puedes tomar un baño - señaló el baño y la ardilla rasguñó la mejilla del mayor algo molesto ¿Le estaba diciendo sucio o algo así? Peor aún... ¡Era un prvertido y quería verlo! Han chilló ante el pensamiento - Solo porque no has cambiado, también debes dejar ser a tu humano, pero si no quieres está bien.

La ardilla fue dejada con suavidad sobre la cómoda cama mientras el alfa se preparaba para su encuentro...

Encuentro que no quería tener. Porque sería lo mismo de siempre

Mi ardilla. [Minsung] Where stories live. Discover now