Capítulo 19: Fantasmas

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Al despertar Klaus a mi lado todo alterado con su camisa de mangas gris a mi lado asustado y ansioso, como si hubiera visto un fantasma, me acercó sin mencionar nada al respecto dándole un fuerte abrazo como respuesta.

La música suena en el bar de Rousseau's en el funeral del padre Kieran, camino entre la multitud viendo a Klaus con camisa negra y chamarra de piel negra con la mirada molesta dándole un trago a su whisky, Camille camina y se sienta con su suéter gris y su vestido negro sienta, Camille  menciona viendo a Klaus.
—Oye, vuele a la tierra.
Me acercó tocando el hombro derecho de Klaus y se mueve del lugar para hacer un espacio para sentarme a su lado, tomó el vaso de vidrio viéndolo con concentración y perdido y lo observo mirando a Klaus que no tardo en preguntar.
—Amor. ¿Qué pasa?
Klaus toma mi mano y tratando de calmarme preocupada por su estado por lo ocurrido en la mañana dándome  un beso a mi frente y volteo a ver a Camille dice serio.
—Tu rostro.
Camille menciona tranquila.
—Sanará. Escucha, quería agradecerte.
Klaus levanta su vaso de nuevo molesto y menciona molesto.
—A menos que hayas venido equipará con los medios para llenar esto, las obviedades adicionales no son necesarias.
Observo a Klaus seria preocupada al respecto de su actitud hacia nuestra amiga Camille,Camille dice sin más.
—De acuerdo.
Analizo a Klaus tratando de averiguar que lo atormenta y preguntó de nuevo.
—Nik. ¿Qué pasa que es lo que tanto te atormenta? Dime. Habla conmigo.
Klaus no responde y Camille molesta agrega.
—Estoy de pésimo humor porque mi tío acaba de morir y la gente está de fiesta como si fuera un carnaval. ¿Cuál es tu excusa?
Miro a Camille y Klaus y vuelto mencionar sería y firme.
—Amor,dime cuál es el problema. Klaus, en serio, ¿qué sucede...?
Klaus toma mi mano y confiesa con la voz apagada.
—E estado soñando con mi padre muerto. Teniendo pesadillas. No hace falta un diagnóstico, Camille. Ya lo tengo cubierto.Danica, amor ya sabes lo que me a estado atormentado todo el día. Mis miedo sobre la paternidad, de dañar a mi hija como mi padre lo hizo conmigo se está manifestando como pesadillas. Un horrible cliché.
Klaus alza su vaso con whisky dándole un sorbo, Camille menciona sorprendida.
—A decir verdad, estoy sorprendida de oírte reconocer en voz alta que vas a ser padre. La madre de tu hija estando a tu lado siendo un equipo ayudando incluso a su manada cuando la guerra se acerca,no es exactamente que esperar cuando estás esperando.
Klaus observa a lo lejos viendo a Marcel y menciona firme.
—Sé más sobre la paternidad de lo que imaginas, Camille.
Camille observa a Marcel parado entre la multitud, Camille me observa menciona con ironía.
—Y funciono tan bien la primera vez. ¿Por qué cambiar algo?
Camille se levanta molesta dejándonos a Klaus solos. Klaus observa a Marcel sin mencionar una palabra al respecto. Marcel tomó una botella y camino al centro del bar con un vaso en la mano derecha y dio un anuncio golpeando el vaso y la botella y la música parado.
—Sé que no he estado por aquí últimamente. Al padre Kieran que pudiéramos unirnos, juntarnos y compartir unos tragos, y una historia o dos.Kieran llegó al pueblo en un auto viejo y oxidado luego que su padre muriera hace veinticinco años. Y, Maldición,el amaba las fiestas. Eso, por supuesto, fue antes que tomara los hábitos. Pero incluso así, estaba comprometido con el barrio. Sabía que este pueblo lo necesitaba. Y aún lo necesitamos. Por el padre Kieran.
La personas sonríen con tristeza y todos mencionan juntos.
—Por el padre Kieran.
La música continuó. Observo a los lejos a Camille marchándose con prisa.Veo a Elijah sentarse sirviendo unos tragos junto a nosotros y afirma Klaus serio.
—Parece tan poco civilizado reír y bailar cuando un ser amado a muerto.
—Sí. ¿Es mucho mejor practicar tu proceso de luto, Niklaus?—menciona Elijah cerrando la botella de whiskey poniendo la botella en la mesa y Elijah  menciona serio firme a la vez.
—Negación, ira, y acumulación de ataúdes en el sótano. Te lo advierto, Danica, Niklaus está de un mal humor hoy.
Veo a Elijah y no digo nada, Nik no tarda en renegar a regaña dientes.
—Cállate.
Observo a Klaus y Elijah y cuestionó sobre la manada.
—¿Qué pasa con esos anillos de Luna? Oliver intenta comenzar una revolución cada cinco segundos. La gente está asustada, enojada. Y, sinceramente, estoy cansada de buscar evasivas.
Klaus me interrumpe y menciona tranquilo viéndome serio.
—Es un día de paz, Danica, intenta disfrutarlo. Mientras tanto, debido a enemigos desconocidos que conspiran en contra de nuestra familia, estarás más con nosotros y menos en el pantano, donde yo pueda cuidarte de cerca.
Miro a Klaus seria y confieso con ironía.
—Fantástico. Luego podemos hacer esa cosa donde me encierras en una torre, yo escapo, hay drama y luego los dos se dan cuenta de que soy capaz de cuidarme de mi misma.
Me acomodo mi cabello rubi hacia alzando la mano en manera de expresión y Klaus afirma seguro viéndome.
—Los anillos están en progreso, amor. Cumpliré mi palabra. Encontraremos y castigaremos a quien inició el ataque al pantano.Y no te apartarás de mi lado por tu propia seguridad. Pero ahora, voy a terminar esta botella. Y la siguiente con la esperanza de ahogar al demonio que eligió este día para acecharme.
Klaus tomó la botella con ironía haciendo casi un brindis de enojo.
—Salud, Mikael. Impecable sincronización freudiana.
Volteo a ver sería a Nik y a  Elijah a la vez recargada en la mesa y Elijah menciona serio.
—Explícate. ¿Has soñado con nuestro padre?
Nik contesta con recelo en la voz y con fuerza en la voz.
—Adelante. Ríete.
Elijah con la mirada seria confiesa serio viendo a Nik a los ojos algo preocupado.
—Te puedo asegurar que no hay nada en eso que encuentre remotamente divertido, Niklaus. Especialmente considerando que he soñado con él, también.
Klaus con la mirada confundía cuestiona viendo a Elijah.
—¿qué?
—Si tú también lo estás viendo...tal vez nuestro elusivo y desconocido enemigo esté ideando un nuevo ataque.
Confiesa Elijah viendo a los lejos Genevieve con su cabello rojo con la mirando seria. Klaus no tardo en agregar con firmeza de nuevo.
—Bueno, entonces, ¿qué mejor manera de interrumpir un día de paz que matando a alguien?
Klaus saluda a Genevieve a lo lejos armando un plan.

La chica del Híbrido Where stories live. Discover now