𝐚𝐡𝐨𝐫𝐚 𝐦𝐞 𝐭𝐢𝐞𝐧𝐞𝐬 𝐚 𝐦𝐢

7.4K 549 85
                                    

27-08-1995

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

27-08-1995

Hoy conocería a Andrómeda y Nymphadora, estaba realmente emocionada, claro lo logre luego de suplicarle durante dos horas a mi madre.

Draco claramente no iría, él no sabía nada, y yo tampoco le contaría nada, correría a contarle a mi padre.

Le conté todo a Theo por cartas, el solo me decía que lo hiciera con calma, que no me emocionara ni nada, que nadie me viera porque según él las cosas estaban empeorando, y si me veían con ellas, sería una traidora de la sangre por juntarme con una traidora y mestiza.

Cuando termine de vestirme baje a la sala, donde mi madre ya, me esperaba.

Vamos? -pregunte mientras llegaba a su lado.

Vamos.

A dónde van? —pregunto una voz a nuestras espaldas, Draco, claro quien más seria.

De compras —respondió rápidamente mi madre.

A Cass, no le gusta ir de compras, por lo menos no contigo.

—Tenemos que comprar cosas de mujeres Draco, no creo que quieras comprar cosas para cuando ando en mis días –respondí, mientras veía la cara de disgusto de Draco.

Claramente en 1995 y sobre todo en el mundo mágico, existían muy pocos hombres que no viesen eso como algo "sucio" Patéticos.

—Mejor me quedo.

Vamos madre.

Salimos de la mansión, para que un auto mágico nos llevara, no podíamos ir por polvos flu, es una red, por lo tanto, mi padre podría saber a dónde fuésemos, y según mi madre ella se arriesgó mucho el día que la vi con ellas, ya que siempre se encuentran en el lugar donde ella y su hermana lo veían como "suyo" cuando eran pequeñas.

Pero por lo que mi madre me dijo tampoco iríamos a ese lugar, iríamos a una casa, no me dijo de quien, quizás iríamos a la casa de su hermana.

Aproximadamente a la hora después –un camino bastante silencioso- llegamos a una casa, se veía antigua y como si no la utilizaran hace bastante tiempo, pero aun así las flores la cubrían por todos lados, las enredaderas cubrían toda la casa. Era muy grande para ser una casa, pero pequeña para ser una mansión.

Cuando bajamos del auto caminamos por el patio, uno bastante amplio, que tenía césped, unos cuantos árboles y arbustos, rosas rojas y blancas, era muy lindo.

De quien es esta casa madre?

De un familiar lejano, ya no vive aquí, pero con Drome decidimos juntarnos hoy aquí ya que nadie viene desde hace años.

Oh, está bien.

Llegamos a la puerta, y mi madre saco una llave, cuando abrió, todo se veía limpio, como si alguien constantemente limpiara la casa.

𝐵𝐿𝑈𝐸 𝐸𝑌𝐸𝑆 //𝑇𝐻𝐸𝑂𝐷𝑂𝑅𝐸 𝑁𝑂𝑇𝑇//Where stories live. Discover now