Colegas // Daniel Ribba

Diez: La llamada

-More...- sonrió aún más.

Ok, me dió miedo.

-Odio cuando pones esa sonrisa porque sé que vas a decir algo de Mau...

-¿Que hacias el otro día con la remera de Duki?-Si, le conté.

-¿como sabes si vos no fuiste?- le preguntó extraña, pasaron unos segundos y conectó los cables. Me miró se levantó y me revoleo con una almohada que tenía por ahí.

Eso tuvo que doler.

-¡ESO NO TE VA A EXCUSAR DE CONTAR, ZORRA!- La señaló Lucía.

-Ehhh.... Messi.

-Dale idiota- dije yo.

-mehr aahsote uchon Majhuyro- dijo bajito.

-¿que?, no se escucha Morena- habló Lucia.

-mehr aahsote uchon Majhuyro- repitió.

Ohhhh.

-AAAAAAAAAAAA- Grité.

-¡NO LO DIGAS!- Me advirtió Morena, señalandome con el dedo.

-¿Que pasó?- preguntó Zoe.

-¡TE ACOSTASTE CON MAURRRRROOOOOOOO!- Le grité, y me puse a hacer un bailecito raro.

-Te- me golpeó con la almohada en la cabeza-Di- otro golpe en la cabeza- je- en la panza- que- otro golpe- no- un golpe en el culo- lo- me golpeó nuevamente en la cabeza- digas idiota.

-Pero eso no quita el hecho- subió y bajó las cejas Lucía, brisa, Zoe y yo.

-Son unas idiotas- contestó frustrada.

En lo que ellas se peleaban me llegó un llamado, cuestión de siempre. No sé dónde carajos dejé el celular. Genial.

-¿Alguna vió mi celular?.

-No- dijeron todas

-Ah para, me senté arriba- dijo Zoe, me lo pasó y le fije quien era.

Atendí.

-Abrhil, ¿mhe podhes vhenhir ahg bughcarh?.

Lo único que me faltaba.

-Daniel, estás borracho. Y yo no soy Abril, soy Roma- las chusmas estas estaban escuchando.

-Rohma? Nsehcito thu ashuda, venhi ahg bustchrame.

Me voy a arrepentir, pero es mi mejor amigo.

-¿Donde estas?.

-Daniel dale, ayúdame por favor.

-Ño- dijo como nene chiquito sentándose en el pasillo del edificio.

-Si me ayudas te doy helado- sonrei. El helado es la debilidad de Dani.

-Ajshudahme- dijo el borracho.

DIGO... Dani.

Me ayudo a entrar al departamento, abrí con la copia de la llave que tengo. Cerré la puerta y fuí directamente con Dani hacia su habitación. Su cuerpo emanaba un aroma a  marihuana y alcohol impresionante.

Lo senté en la cama y le saqué las zapatillas, mientras que él solo dice incoherencias. Hasta un cierto momento que empezó a hablar más claro, eso quiero creer.

-Daniel, me voy. Te cierro la puerta, chau- agarré mis cosas pero antes de levantarme él habló.

-Me peleé con Abril-Habló.

-Bueno...- contesté indiferente.

-¿Querés saber por qué?.

Ay Dios, las ganas de hablar que tiene este pibe, son inmensas.

Mis ganas de dormir también son inmensas.

-¿Por que?- Decidí seguirle el juego, ya que estamos...

-Se enojó y me mandó a la mierda...

-Y por eso soy tu segunda opción...- contesté apunto de enojarme

-...Me mandó a la mierda por que me dijo que no iba a estar conmigo si yo vivía pensando siempre en vos, ¿y sabes que es lo peor?- decidió seguir hablando.

Me quiero ir.

-¿Que es lo peor?

-Que no se enojó en vano, por que es verdad.

-Me tengo que ir Daniel, buenas noches.