Cuanto Te Quise, Cuanto Te Quiero

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Louisa.

Diciembre 14, 2022.

-¿Llevas todas tus cosas?-Me preguntó Joel-

-Si, creo que ya no me falta nada-Dije-

Era hora de partir al aeropuerto, aparte de mi maleta llevaba mi bolso, así que ya era todo.

Salimos de nuestra casa y Joel pidió un Uber para que nos llevará al aeropuerto.

Cuando llegó, subimos nuestras maletas y emprendimos viaje.

-Oye yo nunca he viajado en avión-Dije nerviosa-

-Tranquila es como subirte a la montaña rusa pero peor-Dijo Joel asustandome y yo le dí un golpe-

Cuando llegamos al aeropuerto Joel pagó el Uber y entramos con nuestras maletas.

Yo había pedido vacaciones en el kinder para poder venir aquí, iba a ser la primera vez que pasaba lejos de los niños.

Al igual Joel pidió permiso en su trabajo como programador.

Esperamos un media hora para abordar el avión.

-¿Ya has ido a la playa?-Preguntó Joel-

-Cuando tenía como cuatro años-Dije y reímos-

-Yo tenía diez años la última vez que fui-Tomó mi mano y depósito un cálido beso-Pero ahora voy con mi hermosa esposa-

-Ya basta de halagos, Joel-Reí nerviosa-

-Sólo digo la verdad, mi corazón-

Pronto llegó la hora de abordar el avión y nuestra luna de miel comenzaría.

(...)

Cuando aterrizamos en Cancún y de ahí ya no estaba tan lejos nuestro Hotel en la isla mujeres.

Joel y yo habíamos llegado de noche al hotel y aunque fue un vuelo de dos horas y todo el día nos la pasamos empacando queríamos llegar a descansar.

Nos registramos y nos llevaron a nuestra habitación.

Fue la rutina de check inn que normalmente se hace en un hotel.

Cuando entramos a la habitación y nos quedamos solos, Joel no perdió ni un segundo y ya me estaba abrazando.

-Sabias que los recién casados tienen intimidad diario durante la primera semana-Me dijo y yo reí-

-Calmate si-Dije-Además y si lo hacemos diario corremos el riesgo de quede embarazada...-Dije riendo pero Joel me miró muy raro-¿Qué?-

-Entonces mejor no hay que hacerlo-Dijo y se separó de mí-

-Joel era una broma-Dije al ver que había cambiado de pronto su semblante-

Se sentó en la orilla de la cama y yo a un lado de él.

-¿Porqué te pusiste así eh?-Acaricié su espalda-

-Primero me dió la impresión de que no quieres hacerlo-Hizo una mueca-

-No, si si quiero sólo espera a que descanse un momento-Reí-Pero no es eso lo que te puso así verdad-Negó-Es por el tema de los hijos-

-Si-Suspiró frustrado-

-¿No quieres tener?-Me dolía pensar eso pero debía saberlo-

-Si tenemos un bebé ahora me va robar toda tu atención, tu tiempo y sobre todo tu cariño-Me abrazó fuerte-

-¿Qué?-Lo separé para mirarlo-Y los papás no hacen nada o qué-Reí-

-Además vas a estar tan agotada de estar con él que en la noche ya no habrá intimidad entre nosotros-

Que Lo Nuestro Se Quede Nuestro |J.P.|Where stories live. Discover now