En paz

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Las cosas habían cambiado bastante en los últimos meses, entre ellas el nacimiento del segundo hijo de Felix, quien al igual que Logan había sido un varón, pero en este caso el pequeño heredó el color de cabello de su padre, el pequeño fue llamado Liam. La familia estaba por demás feliz con la llegada de este nuevo bebé, tal así que Changbin no dormía con tal de atenderlo, aunque el pelirrojo menor se había vuelto más pesado a sus dos revoltosos años.
Aron por otro lado, se fue a vivir con su novia con la que se casaría a fin de año, era feliz dentro de sus posibilidades y estaba cada día de mejor humor. Normalmente frecuentaba el internado donde vivía Jeongin, quien había cumplido los diecisiete años junto a sus dos hijos menores, aun estaba el juicio para obtener la patria potestad de los mayores, debido a que habían sido sustraídos ilegalmente y Lean tuvo que presentarse a la corte siendo condenado, aunque tampoco le molestaba mucho volver a prisión. Sebastián mimaba todo el tiempo al pequeño castaño, quien ahora atravesando sus últimos días de embarazo se sentía digno.

Minho se había instalado completamente en la casa de Chan, iba con Lysander de aquí para allá y hacía una semana se enteró de su reciente embarazo de apenas unos días, lo que produjo aun más felicidad en la pareja y el hermanito. Hyungwon había logrado que Zaphiri comenzara a hablar despacito, y le ayudaba a modular mejor las palabras, Gael estaba satisfecho y se había divorciado de su mujer para casarse legalmente con Hyungwon y poder unir a la familia. Por lo cual, ya nada podía ser mejor.

-¡Aaaaagh! -Jeongin, quien estaba caminando por los pasillos del internado, se tomó el vientre y frunció el ceño.

-¿Qué sucede? -preguntó Johnny  saliendo de su cuarto, junto con Taeyong, quien también atravesaba el quinto mes de su hijo Etienne, o así era como le llamarían.

-El bebé....me está desgarrando -apretó fuerte las manos por el dolor de las contracciones.

-Solo respira, inhala.....exhala...

-¡Se respirar, ve por el auto! -gritó el menor, haciendo que Johnny inmediatamente salga corriendo.

-Tranquilo Jeongin, debe ser un momento especial para ti porque serás ma....–Taeyong estaba en pleno discurso pero el menor le toma del brazo fuertemente.

-Este es mi quinto bebé, tú no tienes idea -gruñó entre dientes, Taeyong no creyó que un chico tan sereno como el joven Diamond (quien había recuperado su apellido) fuera un ser repleto de ira cuando estaba en labor de parto.

-¿Qué sucede? ¿Qué son esos gritos? -preguntó Sebastián caminando por los pasillos.

-¡Oh, nada Sebas! -Habló con ironía-. Estábamos charlando.... ¿Qué crees que me está pasando? ¡Estoy por tener al quinto!

-Ah, ya....-habló tranquilamente-. ¿Necesitas algo?

-Ahora mismo una escopeta...

-Es mejor no darte armas mi querido niño -habló Taeyong con tono de broma pero al ver la mirada asesina del joven decidió no volver a hacerlo y ayudarle a llegar hasta atrás.

Subió al auto y Johnny condujo hasta el hospital, claro estaba que dejaron a las dos criaturas de Jeongin con Zuno y Junsu, los gemelos ya estaban acostumbrados a cargar con los niños de Jeongin desde siempre, y para ambos, ya eran tíos políticos. Durante el trayecto, Jeongin no dejaba de gritar y apretar la mano de Sebastián, quien fruncía el ceño por el dolor, aunque era mejor aclarar y creo el castaño lo dejó en claro a los gritos, que el dolor de mano no era nada comparado con lo que estaba sintiendo él.

-Imagínate una norme bola de dos kilos apretando contra tus intestinos -gruñó a regañadientes, Sebastián no quiso ni pensarlo-. ¡Aaaagh! Maldita sea, eres un mal parido -le gritó al vientre-. ¡Han te odio hijo de re mil puta!

𝐋𝐄𝐓𝐓𝐄𝐑𝐒 (  𝐵𝑎𝑛𝑔ℎ𝑖𝑛𝑜 )Where stories live. Discover now