Evil Is A Point Of View

Cuarto

Will se levantó la noche siguiente, vistiéndose con su ropa habitual y consciente de que Hannibal las estaría desechando por cosas nuevas muy pronto, de todos modos.

Hambriento, Will se coló en la habitación contigua a la suya, donde estaba el ataúd de Hannibal y golpeó la tapa.

Hannibal abrió la tapa y se levantó majestuosamente, mirando a Will con curiosidad cuando salió del ataúd. El Alfa también estaba hambriento, como siempre lo estaba al despertar.

"Buenas noches, William"

Will se inclinó y besó a Hannibal una vez en la boca.

"Pensé que estarías levantado antes que yo"

"Me quedé despierto durante aproximadamente una hora después de que te fuiste a descansar esta mañana" exclamó Hannibal, lamiendo sus labios para captar el sabor residual ahí. "Como tal, hoy me levanto más tarde de lo habitual"

"¿No pudiste dormir?" preguntó Will, apartándose del camino para dejar salir a Hannibal, con sus ojos observando cada movimiento de su cuerpo, cada músculo y cada contracción.

"Una mente activa es la que tenemos los dos" respondió Hannibal, revoloteando rápidamente por la habitación, vistiéndose. "Una carga que compartimos, aunque no lo considero como tal, no, el sueño me eludió durante bastante tiempo"

"Siento escucharlo" exclamó Will, jugueteando con la manga de su camisa mientras Hannibal se preparaba para la noche.

"No hay nada que lamentar, pero gracias, Mylimasis" sonrió Hannibal y se arregló la corbata. "Tenemos una noche maravillosa planeada. Sin embargo, sugiero que nos alimentemos primero"

"Entonces, ¿saldremos?" preguntó Will, saliendo de la habitación junto con Hannibal, hasta la puerta donde se puso las botas.

Hannibal lo siguió y se puso las botas como lo hizo Will.

"Me muero de hambre. Tengo la intención de comerme a la primera persona que encontremos" Hannibal se rió entre dientes. "¿Quizás alguien en el camino?"

Aún luchando con su conciencia, Will se encogió de hombros.

"Quizás"

Con un asentimiento y una mirada, Hannibal agarró las llaves y su billetera, caminando hacia la puerta. Esperaba que alguien se presentara, aunque ir de compras con hambre también podría resultar un experimento interesante.

"¿Vamos?"

Will salió primero y se subió al coche, aunque se preguntó por qué se molestaban en absoluto con su velocidad.

Observando a la gente, supuso.

Will se abrochó, esperando, el hambre no era lo suficientemente evidente como para ser terrible. Fue para lucirse y porque a Hannibal le encantaba la elegancia. Un buen automóvil lo proporcionó. Él también entró y retrocedió, dirigiéndose por la carretera.

En unos minutos de compañía silenciosa y tranquila estacionaron a pocas cuadras de la boutique, lo que les daría la oportunidad de ver si había alguien que quisieran antes de llegar ahí.

Hannibal salió y esperó a Will.

"La tienda está a tres cuadras de aquí"

"Qué conveniente" dijo Will con una mirada, y luego salió, cerrando la puerta detrás de él suavemente. "No sería un buen augurio entrar en una boutique con la cara cubierta de sangre"

"Necesitas aprender el arte de alimentarte de manera limpia. La muñeca es excelente para tal cosa" sonrió Hannibal y cerró el auto con llave, comenzando a caminar. "Sin embargo, podemos esperar, si lo deseas"