𝑼𝒏𝒂 𝑼𝒌𝒂𝒊 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒆𝒒𝒖𝒊𝒑𝒐. (𝑯𝒂𝒊𝒌𝒚𝒖𝒖 𝒚 𝒕𝒖)

𝑺𝒉𝒊𝒎𝒊𝒛𝒖.

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Los chicos (menos con el que Aika se quedó en este final) nunca estuvieron enamorados de Aika, a lo mejor si le atraían físicamente, pero sentimentalmente no.
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Aika: Lo hare.—Dijo con determinación.

Alex: Hacer que cosa?

Aika: Declararme a...

Flo: A quien?

Aika: Shimizu, Hola!—Saludo con cierto nerviosismo. Alex y Flo se giraron a la dirección donde Aika estaba viendo.

Flo: Alta torta que es.—Susurro para Alex, refiriéndose a Aika.

Shimizu: Hola.—Saludo con una sonrisa.

F/A: Hola.—Saludaron de la misma forma.

Shimizu: Nos vamos, Aika?

Aika: Claro!

Alex: Oe, Aika.

Aika: Dime.

Flo: Acuérdate de hacer lo que nos habías dicho.

Aika: Oh, si, lo haré.—Sus mejillas estaban sonrojadas.

Shimizu: Estás bien? Estás algo roja.—Pregunto preocupada.

Aika: E-Eh...Si! Vamos?

Shimizu: De acuerdo.—Ambas se despidieron de los chicos.

Aika: Iras al baile de esta noche?

Shimizu: No lo sé, igual no tengo pareja para ir.

Aika: Entonces se mi pareja! Yo tampoco tengo.

Shimizu: Me encantaría.—Dijo con una gran sonrisa.

...

La fiesta se realizaría en un tipo castillo, todo era muy bonito y elegante, las mujeres vestían con vestidos tipo princesa y los hombres con smoking.

Ambas estaban pasando el rato junto a los demás del equipo, todo era muy divertido.

Aika: Salgamos al patio? hay mucha gente aquí.

Shimizu: Estaba por pedirte lo mismo.

Ambas se dirigieron hacia el patio, era muy bonito a decir verdad, lleno de plantas y cosas así.
Llegaron a un tipo domo que se encontraba ahí, al mismo tiempo que escuchaban la canción que provenía de la sala de baile.

Aika: Oh! Me gusta mucho esta canción.—Se giró hacia Shimizu y le tendió la mano.—Te gustaría bailar conmigo?

Shimizu:...Me cantaría.—Dijo con un sonrojo.

Ambas empezaron a bailar acorde iba la canción. La canción que sonaba era Runaway de Aurora (La pueden reproducir en multimedia, donde está la foto de Shimizu).
A medida que iba avanzado la canción, más se hechizaban con el ambiente que les recordaba, estaban perdidas en sus ojos, apreciando la belleza de la otra.