PROLOGO

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El camino se había convertido en un largo viaje de pesares y padecimientos

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El camino se había convertido en un largo viaje de pesares y padecimientos. No era fácil atravesar un país de costa a costa, mas la desesperación auspiciaba tan menesteroso trayecto, que no importaba el dolor físico o distraer la mente con recuerdos amargos que no hacían más que avivar las ansiedades. Sentía el estómago como una caldera hirviendo pociones cáusticas.

Actuando en mi contra, el tiempo transcurría sin reparo.

Tormentas fuertemente oscuras avanzaban feroces a mis espaldas, relamiéndose mi rastro, deseosas por atraparme.

No podía hacer más que recordar todo lo que había perdido y los turbulentos problemas que había ganado. 

El fracaso y el dolor daban puntos a mi favor, la esperanza palidecía a mi horizonte; Sin embargo, un ligero atisbo de consuelo parecía brillar en mi camino.

El trayecto se hacía cada vez peor, pero valía la pena ir tras esa minúscula señal de salvación...

O eso creí.

Debía llegar en el menor tiempo posible al pequeño pueblo costero de Valle Del Puerto. Habían pasado varias décadas de no pisar dichas tierras.

Debía ubicar a un hombre del que poco mencionaban en mi familia, sus riquezas y fama eran de notable conocimiento hasta en las clases más altas de La Gran Colombia, pese a ello, mis parientes y cercanos querían recordarle como si fuera un fantasma.

Solo le vi una vez y es poco o nulo lo que recuerdo de él, aun cuando mis congéneres lo remembran al detalle, poco o nada conocían de su vida a plenitud. Todo en él era un misterio, un ser único, capaz de contener secretos tan oscuros como el mismo universo.

Faltaba poco por arribar, dos colinas amplias me separaban de Valle Del Puerto y debía empezar a indagar sobre el capitán Agramonte para evitar pérdidas o confusiones. Solo sabía dos cosas importantes de él: que era el dueño de la vieja casona en la colina y que dirigía el más grande navío pesquero llamado "Las Arpías".

Aires de esperanza y oscuridad se respiraban a los lejos...

Aires de esperanza y oscuridad se respiraban a los lejos

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CAPITÁN AGRAMONTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora