Alas - Hawks / Takami Keigo

16- Final

Estabas frente a la oficina donde tú y el héroe número dos del momento solían trabajar diariamente. Suspiraste, aunque jamás ibas a admitirlo estabas bastante nerviosa por saber cual era la respuesta.

Las probabilidades de que el no te enviase notas eran insignificantes pero nunca cero.

Sin pensarlo entraste y el no estaba ahí. Listo. Eso era lo que faltaba para que tú dignidad se fuese al diablo.

Pero entonces llegó un mensaje a tu teléfono de que subieras a la azotea, irritada lo hiciste. ¿No podía pedirte que salieras a la ventana? Y tu que odiabas las escaleras.

Escalón por escalón subiste. Tomaste aire cuando al fin llegaste, ibas a decirle a ese pollo tonto que colocara un elevador en ese maldito edificio. El estaba ahí con una rosa en la mano, tan cliché como solo el podía hacerlo.

— Si me vuelves a hacer subir estas malditas escaleras voy a arrancarte las alas.

El no dijo nada y te tomó de la cintura y te levantó por los aires.

— Deja de maldecir un minuto y mira hacia abajo.

Refunfuñaste pero al final lo hiciste. Escrito con pétalos de flores que no habías notado hasta el momento había una pregunta poco usual.

"¿Quieres casarte conmigo?"

— Estas demente.

— Hace tiempo supere el ser tu novio. Ahora solo quiero casarme contigo.

No lo pensaste y solo dijiste "acepto"

Claro que no pudieron casarse hasta dos años después que el ajetreo de la vida de héroe por fin se los permitió.

Poco a poco fuiste escalando y cuando eras la heroina numero 3 y con más aceptación incluso que el rubio quedaste embarazada a pesar de las precauciones que ambos tomaron con respecto a eso ya que no querían hijos aún.

Pero el verdadero impacto fue en el momento en que les informaron que tendrían trillizos de un solo golpe, increíble aquello ya que ambos eran hijos únicos.

Dos niños y una niña de los cuales dos heredaron alas y el tercero heredó tu particularidad.

Esa familia era algo que tú jamás anhelaste pero estabas segura de que era la cosa que ma feliz te hacía. Ahora había más alas revoloteando por tu hogar y dejando plumas por doquier.

FIN