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Para la pequeña tortuga los días pasaban lentos y grises aquel cambio de vida era de lo mas deprimente posible, sentía que vivía en una pesadilla misma y todo empeoró cuando el maestro llegó.
Los entrenamientos comenzaron de lo mas pesado lo trataban como si tuviera años practicando el arte del ninjutso, ya que según el mismo Oroku Saky no había tiempo que perder.

- Tendrás que entrenar si es que quieres seguir con vida, no dudaré en hacerlo si es necesario aquí solo caben guerreros no débiles, estás advertido tortuga, será mejor que lo hagas bien..- amenazó destructor antes de salir de el dollo.

Así los días empezaron a hacerse pesados, entre los largos entrenamientos bajo el sol sin comida o agua, las caminatas que parecían no tener fin y sin contar aquel temor de cometer un error, si se llegaba a equivocar en una postura, combate o entrenamiento su castigo iba empeorando dependiendo de cuántas veces se equivocaba, la primera vez solo fue un golpe el cual le había dolido pero era un dolor soportable, la segunda fue más fuerte, así hasta que llegaba al grado en que los golpes eran insoportables y quedaba en la inconsciencia.

- Los perdedores no merecen comida o un techo, te quedarás afuera hasta que mejores entendiste- Reprendió Destructor dejando a Leonardo fuera de la casa.

- Será mejor que te pongas a entrenar si es que valoras tu vida- comento el maestro con frialdad

[NARRA LEONARDO]

Muchas veces quise escapar, huir de aquel lugar donde me hacían tanto daño pero parecía inútil, si me llegaban a descubrir tratando de irme era encerrado bajo llave, solo me sacaban para mí entrenamiento y me regresaban a ese cuarto oscuro y frío, muchas veces cerré los ojos imaginando que al abrirlos estaría en casa con mi papá, pero al abrirlos seguía en aquel lugar....

- ¿Y que conseguiría al escapar? No sé dónde estoy ni dónde está mi padre o donde estábamos, sería inútil, además como podría sobrevivir yo solo afuera, yo solo soy un niño....- decía mientras se abrazaba a si mismo - Si no puedo escapar entonces haré que me saquen de aquí, ¡Si! Solo debo buscar una excusa...-

- Valla estás hablando solo, no esperaba más de un fenómeno como tú, ya te volviste loco estando aquí adentro- bufo Cristian entrando a escondidas por la puerta

- ¿Que quieres aquí? No creo que te hayan dejado venir- dijo molesto

- Encontré las llaves y quise venir a ver cómo te volvías loco poco a poco y cuando te oí hablando solo supuse que ya lo estabas- Comento enseñando las llaves

- ¿Si me vuelvo loco a ti que? No creo que te ayude a ser mejor en los combates karai siempre te gana, además si te descubren aquí te van a castigar y aunque te pongas a llorar como siempre no los vas a conmover - soltó burlón

- Eso no es cierto, yo no me pongo a llorar soy mucho mejor que karai, mucho mejor que tú y nada de lo que me digas va a cambiarloooo- Tomo aire y continuo - además te escuché decir que te quieres ir, solo pueden irse los que pasan las clases con el sensei y tú eres pésimo, porque mejor no te rindes y te tiras de un puente sería divertido ver eso- Comento burlón

-¿Como que los que pasan?

- Obvio para pasar tienes que ser un ninja solo así he visto que se van el maestro destrucor los manda a misiones súper peligrosas y solo los mejores regresan- hablo con entusiasmo


Criado Por Mi EnemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora