𝓦𝓲𝓽𝓬𝓱 [𝓙𝓪𝓬𝓸𝓫 𝓑𝓵𝓪𝓬𝓴] [#1]

🎀E S P E C I A L D E A Ñ O N U E V O🎀

La segunda navidad de Lindsey en la Reserva

( Año nuevo en época de: Luna nueva)

La chica miraba con atención a su amiga morena mientras que ella le contaba emocionado la primera vez que recibió un regalo de parte del abuelo (obviamente la primera que el recordaba). El abuelo se sentía feliz de tener a sus dos nietos juntos en casa, era algo maravilloso, pero no estaban solos, sino que se encontraban en casa de Emily en el patio con los demás integrantes de la manada.

Lindsey intentaba de mantenerse serena y con una buena cara, pero era casi imposible, había pasado un año desde que se imprimo de Jacob, un año desde que el la había mandado al demonio, un año desde que Isabella comenzó a ser una piedra en el zapato para ella, un año desde que comenzó a odiarse a si misma, ella solo podía preguntarse:

«¿Que había hecho mal?»

Tal vez era su piel morena o su personalidad lo que no le gustaba al lobo, fuese lo que fuese ella se sentía mal por no ser lo que Jacob esperaba. Pero también estaba furiosa con Jacob por hacerla sentir tan insegura dé si misma, tan inútil y tan inservible. Todo era culpa de el, si el no la hubiera enamorado, si ella no lo hubiera conocido ahora estaría bien, pero en vez eso estaba bebiendo un vaso de cerveza junto a Leah Clearwater mientras hablaban de las desgracias de la vida.

— Al menos a ti con te cambio por tu prima — Dijo la chica

—Al menos a ti te quiso mientras era humano — Suspiro la castaña — A mí me veía como una hermanita, y ahora me ve como un grano en el culo

— No es tu culpa — Dijo Leah animando a su amiga — Es un idiota

— Dime algo que no sepa —gruño Lindsey — Al menos tu lo estás obligada a estar con alguien que no te quiere

— Tienes razón, pero tengo que ver cómo el chico que amo ahora ama a alguien más — Dijo Leah mientras le daba un sorbo a su bebida

— Pero tienes opción de ir y besar a quien quieras, yo no puedo — Lindsey se jalo del pelo — Tu si

— ¿Quien dice que no puedes? — Preguntó Leah divertida

— La imprimación, eso sería serle infiel a Jacob — Dijo

— ¿Y? El te ha hecho sentir una mierda por cuánto ¿Un año? — Lindsey se quedó callada

— Si per-

— Nada de peros, el te ha engañado y te ya tratado de lo peor — Gruñó Leah — Si el puede hacer eso — Se acercó más a su amiga — Devuélvele el favor

— ¿Eso no me convertiría en una zorra? — Preguntó Lindsey

— Si, pero, una zorra con clase — Rio Leah — Además, no te puede decir nada cuando el anda de prostituto con todo lo que se mueve

Ambas chicas rieron de las ocurrencias de la oriental, pero Lindsey no podía negar que su amiga tenía razón, ella tenía todo el derecho de buscar alguien que si la quisiera, que si la valorará y que si la amara. Aunque estaba claro que no necesitaba a un hombre para ser feliz, ni para sentirse completa, ella estaba completa desde el momento en el que llegó a este mundo.