Capítulo 14: Un paso más cerca.

1 0 0
                                    

Llegamos al frente y allí tras un día de combate firmamos un acuerdo de paz, poniendo fin al conflicto. Lo que el país vecino quería era reducir el tributo que nos pagan. Como ya habíamos pactado antes de todo, acepté. El emperador también lo aceptó y de esa forma volví a casa.

Cuando volví a casa el emperador había preparado un banquete para así celebrar la victoria sobre el enemigo y la vuelta de la paz. Todo el mundo nos recibió como héroes y la capital rebosante de alegría celebraba su victoria militar. Era un ambiente muy festivo si tenemos en cuenta que al día siguiente sería el funeral del príncipe heredero. El emperador no proclamaría su nuevo heredero hasta un mes después del funeral. Había varios candidatos válidos, pero estábamos tranquilos, sabíamos cuál iba a ser la decisión del emperador.

El tiempo pasó en un parpadeo y de esa forma llegó el momento de que el emperador anunciara su decisión. Ese día se reunieron todos los candidatos en la sala del trono y todo el imperio estaba pendiente de las palabras de su máximo líder a quien todos respetaban. Todos estábamos en un solemne silencio cuando llegó un emisario con una noticia del emperador. Todavía no daría a nadie el puesto de heredero, puesto que no tenía claro quién era el más digno de poseerlo. De esa forma se pospuso la ceremonia.

Medio mes después se anunció que finalmente había tomado una decisión el emperador. Nuevamente nos reunimos todos la princesa IA está sentada a mi lado como una de las candidatas al trono. Está embaraza de 9 meses y pronto debería nacer el joven príncipe. Mi primer hijo, el pensamiento de esto me trae emociones difíciles que no sé cómo afrontar. Por un lado, es mi hijo y no puedo evitar a quererlo más que a nada, pero las circunstancias de su nacimiento me traen un regusto amargo. Ni su madre ni yo nos amamos y solo lo usamos para ganar poder y poder derrotar al imperio y sus formas injustas. Pensar en el amor hace que mi mente piense en él, desde que hicimos el amor no hemos hablado como deberíamos y no creo tener la fortaleza de decirle adiós en un futuro ni ahora. De pronto oigo la voz del emperador, al parecer lleva un rato hablando y no me he dado cuenta.

-... por estas razones creo que mi hija IA y su marido David deben ser quienes me sucedan. No solo es mi hija mayor, si no que además tienen su vientre al siguiente heredero. De forma que es la elección más lógica y la mejor.

No escuchamos nada más ni nos quedamos al final de la ceremonia, la princesa había roto aguas y estaba de parto. Se fue con las doncellas a la habitación y yo fui tras ellas, pero el emperador me detuvo.

- Como marido de mi hija quien acaba de irse por unas hermosas circunstancias. Te hago a ti David Listherter entrega de la corona imperial y te declaro como mi heredero desde hoy hasta la muerte.- dijo el emperador.

Me acerco y el emperador me corona. En ese momento ambos nos disculpamos y dejamos al resto de los invitados en la fiesta mientras que ambos nos dirigimos al lado de la princesa para ver cómo va.

Antes de que saliéramos de la sala del trono ocurre algo inesperado que no estaba en mis planes. Alguien dispara una flecha al emperador le da directamente en el corazón por lo que muere al instante y no da tiempo a curarlo con magia. Se dispara una segunda flecha en mi dirección. En medio de la confusión consigo cubrir mis puntos vitales con mis brazos y la flecha me acierta en un brazo. Finalmente, los soldados reaccionan y se movilizan, pero necesitan que alguien les de órdenes. Mis caballeros aparecen a mi lado y por fin consigo pensar con claridad. Sin pensarlo dos veces comienzo a dar órdenes a todos:

- Alex, Cris coged al emperador y llevarlo con el doctor rápido que os acompañen algunos soldados imperiales; Ian y Kevin organizad a los soldados para proteger a los invitados y encontrad al culpable; Dani asegúrate de que la emperatriz esté bien, quédate con ella un rato; Mickel tú te quedas conmigo; ahora id.

- Sí- dicen todos al unísono.

En ese momento todos nos separamos y los chicos y los soldados se van dispuestos a cumplir mis ordenes perfectamente. Doy unas palabras de tranquilidad a los exaltados invitados y pido su colaboración para aclarar lo sucedido y encontrar al culpable. Una vez hecho esto me dirijo con la princesa IA. Al llegar me encuentro allí a Dani y a la emperatriz. Está llorando, pero lo intenta disimular lo mejor que puede. Dani se encuentra a su lado confortándola con su silencio y su presencia. En ese momento sale la matrona de la habitación y nos da la buena noticia: ha nacido un sano varón y la princesa está perfectamente, aunque cansada.

Al parecer el atacante no había llegado hasta la princesa todavía, genial. Aliviados entramos la emperatriz y yo en la habitación. Un rato después comenzamos a oír signos de batalla, deben de ser Dani y Mickel quienes se han quedado fuera, pero ¿quién es su adversario?

- Deben de ser los asesinos – digo en voz alta.

Sin pensarlo dos veces salgo de la habitación, nopuedo dejar que mis amigos mueran protegiéndonos. Veo a tres personas tapadashasta la cara con ropas oscuras, deben de ser los asesinos. Dos de ellos luchancontra Dani y Mickel con espadas y magia. El tercero está oculto de los demáslleva un arco y flechas. Son las mismas que han asesinado al emperador. Lo veocoger una y apuntar su objetivo es Mickel que ha desarmado a su oponente.Apunta directamente a su corazón. Dispara la flecha y yo en un acto reflejoempujo a Mickel recibiendo la flecha en su lugar. Me ha dado en el hombroderecho. Rápidamente lo detienen y con eso los tres sospechosos son arrestadosy conducidos a las mazmorras. 

Los secretos que ocultoWhere stories live. Discover now