Open Mind

35. La araña

CPOV

La oficina se ve más pequeña hoy, ¿o es más grande? Debe ser el efecto del 'tiempo muerto' y lo inusual y necesario que fue. O tal vez es solo la tontería que estoy recibiendo de Ros en este momento.

"¿Qué quieres decir con que la reunión fue reprogramada?"

"Solo dos horas Grey. Andrea lo sabe, ella movió tus otras reuniones, relájate".

"Mm"

"Le dije que no te lo dijera ya que no era una emergencia".

Ros se pone de pie y noto un bulto en su vientre. "¿Qué demonios, Ros? ¿Estás embarazada?"

Ella me muestra una riñonera mientras se la quita. "Lo olvidé. Gwen me hizo usar esta cosa con algunas cosas horribles para dejar de fumar".

Intento ocultar mi sonrisa pero es casi imposible.

"Sí, ríete mientras puedas Grey, te dije que solo empeora. Esos bonitos ojos azules te exigirán cada vez más. Un día ya no podrás reconocerte en el jodido espejo".

Dios, creo que ya estoy allí. La peor parte es... ¡No me importa!

Anoche fue un reto para mis nervios, en todos los sentidos. Ahora sé que hablaba en serio cuando decía que necesitaba una advertencia sobre su período, lo que significa que piensa demasiado y reacciona de forma exagerada, más de lo habitual. No puedo evitar una sonrisa porque parece ser que ella también se pone atrevida y curiosa. En el fondo es una criatura tan carnal, y lo está descubriendo conmigo. Soy un hijo afortunado de...

"Sobre SIP".

Mierda. "¿Qué?"

"Hay otro comprador. Tenemos competencia".

"Bueno."

"¿Bueno?" Ella se ve sorprendida.

"Sí, todavía no estoy seguro de esa adquisición, pero quiero saberlo todo; quién, dónde y cuándo. Todo sobre ese comprador".

"Está bien. ¿Puedo hacerte una pregunta?"

La miro con recelo, ella nunca pide permiso, debe ser personal.

"¿Qué?"

"¿Qué pasa con esa barba, Grey?"

"Solo lo estoy probando". La acaricio a la defensiva. "¿Te gusta?"

"¡Por supuesto que no!"

"Bien, no quiero que te guste".

Ella sonríe. "Ah, la barba es para ojos azules... Estamos tan jodidos, riñoneras, barbas".

Sal de aquí, Ros. "No te olvides de cerrar la puerta. Nos vemos en un par de horas". Ella capta la indirecta y se va sonriendo.

Tengo mucho que leer pero me preocupa Anastasia. Estaba callada esta mañana, demasiado callada, y la última noche también fue difícil para ella. Me dirijo a su oficina sabiendo que no debería. Ros tiene razón, estamos tan jodidos.

Su oficina está vacía, así que me siento detrás de su escritorio para mirar sus cajones. Mm, este libro. Recuerdo que cuando lo leí, esas malas entrevistas, ella no debería estar leyendo esto. Su escritorio es un desastre, pero un desastre organizado, debe haber un sistema para entenderlo.

La puerta se abre repentinamente y hay mi par de ojos favoritos en el mundo mirándome. Su rostro muestra sorpresa, luego diversión.

"¿Está espiando?"