Pesadilla [COMPLETA] [+18]

Capitulo 9

Pasaron unas cuantas horas y llegó Violet con una bolsa

—¿Qué hay ahí?

—Dijiste que querías hablar con Jasper, traje un celular del más allá— Decía entre pequeñas risas y me mostró una tabla ouija, velas y otras tantas cosas.

—Espero que tengamos buena señal aquí

—La tendremos después de esto— Me mostró el mazo de cartas— Ahora sí, sabrás todo lo que se te ha ocultado

Nos quedamos un rato esperando a que todo saliera volando, no pasó nada. Al parecer teníamos autorización de hacer lo que quisiéramos.

—Muy bien, tus amigas te ocultan algo, te quieren mucho pero por alguna razón quieren que pierdas tu virginidad lo más rápido posible. Tu prometido es un patán de primera clase, no te ama, solo busca acostarse contigo. Tus padres te guardan un secreto que se te revelara dentro de poco. Un hombre de tu pasado regresará a ti dentro de poco y de manera sorpresiva. Los hombres que te persiguen, deberás tener cuidado con ellos o te harán daño. Hay otro hombre, ésto está algo borroso, no me dejan ver, solo puedo ver felicidad.

—...

—¿No dirás nada? ¿No tienes más preguntas?

—No, nada. Sabemos que éste no era el objetivo

—Lo sé, pero ésto nos ha dado bastante energía para la tabla

—¿Por qué no apareció la cosa en las cartas?

—¿Hablas de Jasper? No sé por qué no apareció

—No importa. Saca la tabla, hablaremos con él

Nos sentamos en la mesa de la cocina, colocamos la tabla para por fin empezar y de pronto...

—No se atrevan a voltear

Quedamos pasmadas al escuchar una voz masculina detrás de nosotras. Yo sentía un aura extraña en mi espalada pero Violet se veía algo relajada.

—¿Cómo has estado, Jasper?

—Mejor que tú, bruja. No estoy aquí para reparar amistades rotas, sino por esta muñeca— Sentí como sus manos se posaban sobre mis hombros, se acercó a mi oreja y susurró— Si querías hablar conmigo solo tenías que decirlo, estoy contigo la mayor parte del tiempo.

—¿Amistades rotas?— Pude decir todo, preguntar todo y solo eso salió de mi boca

—Muñeca, hablemos de negocios— Dijo esa cosa, mientras apartaba mi cabello y dejaba a la vista mi oreja para besarla

—¡No hagas eso!— Grité ante la acción de ese demonio— Hablemos de negocios— Cambié de tema— ¿Recuerdas cuáles son los detalles del trato?

—Claro que lo recuerdo; es tu virginidad y cuerpo a cambio de mi protección, esclavitud y blah blah blah

—¿Esclavitud? ¿Por qué un demonio como tú dejaría todo por una simple humana?— Cuestionó Violet

—Eso no es de tu incumbencia

—También lo notas, ¿Verdad?

—¿Notar qué? Y esta vez no quiero interrupciones— Sentencie

—Hay algo en ti que atrae a las personas en especial a los hombres, por eso cuando te conocí te mencioné que eras especial y aquí tienes la prueba más clara de todas; un demonio al que no le importa dejar su libertad solo por tenerte

—Muñeca, cerraremos el trato, ¿no es así?— Dijo el demonio ignorándonos

—En realidad no, quiero modificarlo

—No puedes, tú no participaste en aquel ritual y nosotros respetamos el trato tal cual fue hecho. Pero por ser tú, pídeme algo y lo haré, aunque no te saldrá gratis

—¿Lo que yo quiera?

—Sí, lo que sea

—Déjame pensarlo, te respondo luego. Dijiste que la mayor parte del tiempo estás conmigo, ¿no? Te llamaré cuando se me ocurra algo— Su ofrecimiento era demasiado bueno para ser verdad y lo más importante; ¿Cuán caro me saldrá?

—Bien, esperare— Desapareció

Luego de eso, Violet se marchó y yo fui a dormir. Tengo que pensar muy bien en que es lo que le pediré, tengo algunas ideas pero debe valer la pena. No será gratis.