Ready Girls?✔️ (EN EDICIÓN)

22. La chica

Caroline me agarra de los hombros y me para, —¿Seguro que ya no te quiere utilizar?— susurra como si alguien nos fuese a escuchar.

—Si, estoy segura— suspiro pasándome una mano por la frente.

Mi móvil suena, anunciándome de que tengo un mensaje.

Ryan.

Prepárate, esta noche tenemos una cena.

Atentamente.

Tu crush.

—Ok...— bufa y me mira con compasión, —Como te vuelva a hacer daño me encargaré personalmente de él.

Suelto una carcajada y niego varias veces con la cabeza, —Nah.

—En serio, ¿segura que no te está utilizando? Ya sabes, el es Ryan Carter, el chico más popular del instituto, el que tiene a todas las chicas que quiera a sus pies.

Trago grueso y hago una arcada falsa, —No me lo imagino con otra que no sea yo, la verdad— admito sonriendo y Carol ríe conmigo.

—¡Chicas!— nos llama Maria y la miramos fijamente, —Vamos a la cafetería, ¿no?— dirige su mirada a mi, —Además, tu novio te está esperando— dice con picardía y suelto la tercera carcajada del día.

Voy corriendo hacia la cafetería y veo enseguida en cuerpo de Ryan de espaldas a mi, está sentado en una mesa a solas, o eso creía hasta que me acerque.

Mi sonrisa se borra en cuanto veo a la arpía de Anna sentada frente a mi. Ryan se gira y me mira de arriba a abajo. Decido no molestar y me volteo y voy hacia mis amigas apretando los puños. Ryan me llama pero le ignoro y sigo mi camino.

—Vayamos a sentarnos allí— señalo una mesa apartada, de solo tres sillas. Mis amigas me miran a mi y después detrás mía, —Esta ocupado.

Asienten y Maria habla, —Okay eso ha sido raro...

—¡Hey!— no tengo que voltearme para saber de quien se trata, —Hola...— susurra en mi oído y me da un beso en el cachete, —¿Te has puesto celosa?— pasa su nariz suavemente sobre mi piel y me tenso de enseguida.

—No— carraspeo y le miro fijamente, —¿Debería?— sonrío y acerco mi boca a la suya.

—Claro que no— se aparta sin darme el beso. Arrugo mis cejas cuando le veo mirar su teléfono y arrugar las cejas, —Adiós— dice con voz fría.

—Uhhh, huele a cuernos— dice una voz chillona a mi derecha y yo me lamo lentamente los labios.

Respira, no la mates, no debes ensuciarte las manos con una zorra.

La voy a matar.

Quieta.

—Uhhh, huele a cerda— sonrío sin mirar a Anna, —Ay, y también a una especie de... de... ¡ah si! ¡De celos!— inspiró fuertemente y se oyen sus gruñidos y sus tacones pisar fuertemente sobre el suelo, alejándose.

Me levanto de la silla y decido seguir a Ryan. No se porque se ha puesto así de repente en cuanto ha mirado el móvil. ¿Que ocultará?

¿Celos?

No, con lo que paso la otra noche...

Recuerda, Ryan es un chico guapo, popular y rico.

Eso no tiene nada que ver.

Claro que si, todas las chicas van detrás de el. El si quiere, te puede poner los cuernos.

Tengo que dejar de hablar sola.