Encapuchado『Hoodie』

Ingrediente final

Zalgo acercó su aguja a mi brazo, tenía que hacer algo, no podía dejar que el sacase toda mi sangre.

De repente di una patada con mi pierna a Zalgo, no alcancé a darle pero la arena fangosa se le metió en los ojos e hizo que soltase la aguja para acercar sus manos a su cara y quitarse la arena de sus ojos.

—Idiota, ¡Voy a hacerte sufrir más por esto! —Se quejaba mientras limpiaba sus ojos.

Hoodie se acercó a mí e intentó quitar las cuerdas, Slenderman igual.

—Están muy duras, es casi imposible —Dije con tristeza.

—Te vamos a sacar de aquí —Dijo Hoodie.

De repente mis ojos no soportaron más todo esto y comencé a llorar.

—De verdad, debéis irse, aquí solo correréis peligro —Dije.

—¿Eres tonta? ¿Realmente crees que te voy a dejar aquí sola? —Dijo el chico del pasamontañas enfadado.

—No dejaremos que Zalgo se salga con la suya y que salgas más herida —Dijo Slenderman.

Mis lágrimas no cesaban, lo hacían por mi, y jamás creería que alguien pudiese poner su vida en peligro por alguien como yo.

—¿¡Qué hacéis!? —Dijo Zalgo cuando ya podía ver bien.

Tiró algo de su boca hacia nosotros, no sabía que era, pero Slenderman nos protegió.

—Si Zalgo saca la sangre de Gem, estamos perdidos —Dijo Slenderman.

De repente Zalgo aparta a Slenderman y Hoodie de ahí y puso la aguja en mi brazo, sentía como la sangre salía de mi cuerpo y escuchaba unas voces, seguro eran las de Hoodie y Slenderman, también escuchaba la risa de Zalgo y algo más. Pero no podía sacar mi vista de aquella aguja y cómo mi cuerpo se sentía más débil.

—Pronto este bosque será mío, y los demás serán mis esclavos y yo seré vuestro rey —Dijo mientras reía.

Abrió un frasco, era lila, estaba apunto de beberselo, no sabía que era pero creo que no le sentó muy bien.

Hoodie's PoV

Zalgo agarró una de las pociones que se juntaba con la sangre de Gem, se la iba a tragar, esto era el fin... Gem iba a morir y yo tenía que cargar con eso y con Zalgo.

Observé a Gem, tenía los ojos cerrados, seguramente se había desmayado.

Me sentía como la mierda, me sentía realmente vacío, las ganas de querer suicidarme aumentaban a medida que pasaba el tiempo, Slenderman tenía las manos en la cabeza, seguro que Zalgo se había bebido ya el líquido, así que lo observé.

De repente Zalgo empieza a vomitar lila, su cuerpo comienza a temblar y... Se desmaya.

Slenderman y yo nos miramos sin entender.

Nos acercamos poco a poco a Zalgo para cerciorarnos y exactamente, parecía que estaba muerto.

—No puede ser —Dijo Slenderman.

Observé a Gem y fui corriendo hacia ella, le quité la aguja, observé que había perdido mucha sangre, creo que aún seguía con vida.

—Gem... Gem... —Dije mientras le daba palmaditas en la cara.

No respondía.

Slenderman se puso a mi lado.

—Tiene pulso, pero ha perdido mucha sangre, debemos llevarla a la cabaña —Dijo Slenderman.

Las cuerdas se quitaron con facilidad así que agarramos a Gem apunto de irnos.

Observamos a Zalgo que aún estaba en el bosque tirado.