-¡Mira mama! –James señalaba con una sonrisa a aquel hombre pintado de blanco y con un traje negro y gorro a juego que hacia señas
-¡Que guai! –Alexander sonrió mirándolo embobado
-Es un mimo –William miro a sus hijos divertido
-¿Un mimo? –James miro a su padre con el ceño fruncido
-Un hombre disfrazado que se comunica por señas, no habla –William asintió
-¿Queréis darle algo de dinero? –Cristal abrió su bolso y entrego un billete a cada niño, después señalo el plato que había en el suelo –Echadlo ahí
Y los niños se acercaron a dejar el dinero en el platillo y después permanecieron ante el mimo, observándole encantados
-Gracias –William hablo mirando a Cristal de reojo mientras ponía la mano en su cintura
-¿Qué? –Ella se sentó al notar su mano en la cintura
-Por venir con nosotros –William la miro a los ojos –Los cuatro juntos
-Mama, papa ¿A dónde vamos ahora? –Alexander miro a sus padres con una sonrisa
-A tomar algo caliente –William miro a Cristal -¿Un café?
-Un chocolate –Ella sonrió
-Bien, pues un chocolate –tendió una mano a James y este se la tomo
-Vamos –Cristal tomo a Alexander de la mano
Y los cuatro comenzaron a caminar por aquellas maravillosas calles en dirección a la cafetería. En cuanto entraron William fue a pedir dos colocaos, un chocolate y un café, mientras Cristal se sentaba con los niños en la mesa
-Aquí estan –William coloco en la mesa las bebidas y se sentó en su lugar
-Gracias –Cristal tomo su chocolate -¿Y a donde vamos ahora?
-¿A dónde quieres ir tu? –William la miro a la cara y ambos permanecieron perdidos en la mirada del otro
-Mama –James se levanto de la mesa –Voy al baño
-Yo tambien –Alexander se levanto rápidamente
-Tened cuidado –Cristal miro rápidamente a sus hijos hasta que les vio entrar en el servicio
-¿Y? –William le sonrió -¿A dónde quieres ir?
-La Catedral de Notre Dame –Cristal hablo pensativa –Me han dicho que es preciosa
-Bien –el asintió –Pues a la catedral
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Secretos
RomanceTodos tenemos secretos, todos escondemos algo en lo mas profundo de nuestra alma, algo que no queremos que los demás descubran. Y ese es el caso de Cristal. Seis años sin ver a su padre, sin saber nada de el y la única llamada que recibe es para...