capitulo 29. No necesito que me defiendas...

6.6K 341 5
                                    

CAPITULO 29.

Habían pasado dos días desde el aviso para la prueba y más de uno seguía haciendo coñas con mi ataque de pánico por lo del agua, pero el hecho era que ninguno de ellos entendía cual eras las razones. Por lo general pasaba, pero mis amigos no lo hacían; la tarde anterior Nick fue quien me defendió mientras estaba dando una vuelta por los pasillos junto a Jack, mientras iban camino de los terrenos cuatro alumnos de Slytherin estaban volviendo a hacer las típicas bromas y a mi pequeñajo no se le ocurrió nada mejor que defenderme, pero esto a los otros no les hizo demasiada gracia y antes de que diera tiempo a plantearse algo más estaban dándose empujones. Los vi de lejos y corrí hasta ellos.

-¡Parar! – dije mientras les separaba.

-Mira niñata no te metas, esto no es asunto tuyo.

-Si te metes con alguno de mis hermanitos es asunto mío. –Dije poniéndome frente a ellos.

- No son tus hermanos Potter, no son más que asquerosos muggles.

-Simplemente, déjalos en paz – dije mirando fijamente al único que había abierto la boca, un chico más alto que yo, moreno de ojos oscuros.

-¿Y qué si no me da la gana? ¿Vas a ir en busca de tu hermanito para que te defienda?

-No necesito a nadie que me defienda, créeme puedo hacerlo yo solita.

-¿enserio? –dijo dando un paso en mi dirección, a la vez que mis enanos se ponían en medio y yo los apartaba con un brazo. -¿No te vas a poner a suplicar que no te metan en el agua?

- Quizá sí que deba meterme, pero para llevarte conmigo hasta que el oxigeno deje de llegar a tus pulmones.

-Pero si la niña tiene narices, pensé que solo era con el otro Potter porque era tu hermanito.

-Pues ya ves que no. Si te crías en la calle sabes defenderte tu sola de matones, y no te ofendas pero tú tampoco eres para tanto.

-¿Quieres probar pequeña? –dijo volviendo a dar otro paso hacia mí, yo no aparte la mirada pero no dije nada. -¿Te ha comido la lengua el gato? ¿Se te acabaron las agallas?

-No, tranquilo que de eso tengo para rato. –dije dando un paso en su dirección. Pero antes de que llegará a pasar algo llegó Max, quien al vernos tan pegados y al otro chico con los puños cerrados se puso entre ambos.

-Ya basta. ¡Déjala! –dijo mirando al otro chico.

-No necesito que me defiendas. – dije dándole un empujón y apartándolo de mí, para luego girarme hacia Nick y Jack y decirles. –Vamos afuera, Clara y Sophie nos están esperando.

-¿Ya te vas? –dijo otra vez el capullo.

-Sí, ya me has aburrido. –le guiñe un ojo pícaramente y me fui.

En los terrenos las gemelas estaban sentada bajo un árbol, esperándonos fuimos hasta ellas y nos sentamos.

-Jen, ¿por qué habéis tardado tanto?- pregunto Clara

-Nada importante, ¿verdad chicos? –les dije sonriendo.

-Desde luego. –dijeron ambos a la vez.

-Bueno Jenny, ¿Ya sabes qué significa lo del pergamino? – dijo esta vez Sophie.

-La verdad, no tengo ni idea. Dice que he de buscar en mis recuerdos hasta encontrar el error. Pero mis recuerdos no son muy agradables, la verdad es que estoy muy pérdida.

-Mañana lo descubriremos. –contestó Clara.

-Eso es Jen no te agobies, seguro que lo hacer genial. –dijo Jack.

-Claro, porque tú eres la mejor, esos dos no tienen nada que hacer a tu lado. – continuo un sonriente Nick al que yo di un gran beso en la mejilla.

El resto de la tarde la pasamos haciendo el bobo.

Jennifer Lily PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora