3: La (Perfecta) primera cita

11K 526 10
                                    




"¿Cómo diablos llegamos a esto?" Estoy sentado en el asiento del co-conductor recargando mi cara sobre la puerta mientras a lado mío está conduciendo un hombre demasiado atractivo. — Connor. — Lo llamo.

— Si, cielo. — Me dice de manera divertida, pero sin dejar de mirar el camino mientras está conduciendo, me exaspero un poco al recordar lo que sucedió hace un rato.

— ¡¿Cómo diablos te atreves a pedirle mi carro a mi papá para ir a "conocer" el muelle?! — Le grito molesto mientras veo que sonríe tiernamente.

— ¿Cómo puede ser que tu tengas vehículo y jamás lo utilices? Que desperdicio. — Menciona con un quejido y volviendo a mirar el camino.

Aunque parezca difícil yo tengo un pequeño auto que nunca utilizo. Es un Volkswagen Jetta del año 1998 en color rojo. Me lo regalaron hace aproximadamente 1 año, cuando estaba a punto de graduarme, pero como siempre me ha gustado más caminar, decidí guardarlo en el estacionamiento del hotel ya que nunca pensé en necesitarlo ni para cuando empezara a trabajar y mucho menos cuando estoy ayudando en el hotel. Dejando un lado mi automóvil, veo de reojo a mi acompañante mientras sigue conduciendo.

— Tiene un motor excelente, inclusive los amortiguadores están sólidos y su color me encanta. — Comenta mientras aceleraba un poco oyendo el ruido del motor.

— ¿Eh? — Le observo mientras sonríe, tal parece que le gusta mucho mi auto, se ve como sus ojos azules brillan emocionado. Como si quisiera conducir para siempre mi Jetta. — Ya que no lo utilizas... ¿Me lo vendes Max? — La pregunta me hace abrir los ojos de inmediato.

— ¿Venderte mi Jetta? — Cuestiono con miedo de que utilice sus métodos de negociante sobre mí.

— Así es. —De repente se estaciona y mi mirada se concentra en el piso negro. "Sé que no lo he usado, pero es un regalo de mis padres, no podría pensar en venderlo, pero..."

— Lo pensare... — Le digo a Connor quien solo pasa su mano por mi cabello sonriente.

— Por lo menos no fue un no. —

Salimos del coche, y llegamos a Stearns Wharf es el gran muelle que tenemos en Santa Barbará queda a unos 15 o 20 minutos del hotel. Es un gran lugar en donde vienen cientos de turistas a diario.

Es un puerto pesquero por lo cual hay varios restaurantes de mariscos, tiendas de reglaos, heladería e incluso ahí se encuentra el museo de vida marina, es un lugar muy extenso por lo cual se puede hacer una caminata larga y tranquila disfrutando del paisaje del mar y el atardecer. "Son las 7:20 pm. Pronto oscurecerá." Pensaba mientras acordaba que un día por estas fechas en un viaje que hicimos a México oscurecía demasiado tarde, allí la noche se hacía presente casi hasta las 9pm.

— ¿En qué tanto piensas Max? —

La voz de Connor me regreso en si tras mi paseo por las zonas horarias, puedo ver que está en frente de mí y su cabeza mirando hacia abajo directo a mis ojos. "Es más alto que yo... me molesta que tengan que bajar su cabeza para verme."

— No nada, sigamos... — Me porto serio y empiezo a caminar rumbo al muelle, mientras camino puedo notar como mi novio temporal me mira, mr imagino esos ojos celestes mirándome serios, tratando de descubrir todo de mí, desnudándome hasta el alma. — ¡¿Qué tanto me miras?! — Volteo a verlo con una expresión de molestia, él de nuevo se postra en frente mío con sus manos cruzadas y encogiendo sus hombros dando la impresión de hacer un puchero.

21 Noches a tu lado  [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora