Homofóbico {LS}

Prólogo

DEDICADO A: TheLeagueOfShadows

Caminaba a paso lento fuera de la Universidad. Había podido visualizar a Jake saliendo apresurado cuando me observó en su campo de visión, una leve sonrisa apareció en mis labios, pensaba que podía escapar, era un ingenuo.

Tomé mi atajo secreto, el cual me llevaba al estacionamiento y ahí podría atacar a Jake. Cuando llegué observé a mi objetivo salir corriendo de la puerta y se volteó para asegurarse de que no lo siguiera. Muy tarde. Siempre iba un paso delante de él. El chico tomaba aire a bocanadas recuperando el aliento, salí del arbusto en el que me había ocultado para acercarme sigilosamente, aproveché que estaba de espalda para tomar su hombro, este se sobresaltó y dio la vuelta, así que sin pensarlo impacté mi puño directo a su nariz. Lo tomó de sorpresa y debido a mi fuerza logré que cayera al suelo.

--L-Louis...--tartamudeó con pánico.

--Hola, Jake --sonreí hipócritamente.

Me acerqué a él y por instinto retrocedió lo más que pudo aún estando en el suelo. Lo tomé del cabello jalandolo hacia arriba para levantarlo, el pelinegro entre jadeos de dolor se puso de pie. Sin soltarlo lo conduje a una pared que se encontraba cerca del lugar, lo empujé provocando que su espalda chocara con esta y empezé a golpearlo lo más fuerte posible. Jake trataba de protegerse haciendose una bolita pero yo se lo impedia de inmediato.

--Detente! --suplicó. Pegue mi puño a la pared y me acerqué al rostro del chico observando como trataba de recuperar la respiración.

--Jake...--hablé suave, el llamado me miró y sonreí falsamente -- Cuántas veces tengo que decirte, que de mí no huyas? --tomé su barbilla y levanté su rostro para que me mirara.

--Dejame... por favor... --las lágrimas no dejaban de resbalar por sus rojas mejillas.

--Ah-ah --continuaba sonriendo --creo que eso será imposible, sabes por qué? Por que te odio niño --solté con asco.

--Qué te hice? --habló con voz quebrada.

--Simple. Eres homosexual.

--L-Louis... y-yo no escogí serlo --lloró aún más. Solté una pequeña risita, esto me divertia, el imbécil creía que podía burlarse de mí, estaba muy equivocado.

--Me quieres ver la cara? --pregunté molesto.

--No! No, no, yo n...--le proporcioné una bofetada callandolo al instante y comencé a golpearlo de nuevo en su estómago y parte de sus costillas --Te quieres burlar de mí!? Es eso!? --lo agarré de los hombros bajandolo un poco para darle un rodillazo -- Contesta!

Negó con la cabeza y lo lancé una vez más al suelo, lo único que se escuchaba era su llanto desesperado. Por último le escupí el rostro sintiendome orgulloso, sacudí mi ropa y lo miré unos momentos.

--Qué no sabes, que las personas como tú, dan asco? No deberían existir, los hombres tienen que ser heterosexuales! No maricas! -- lo miré con desprecio -- por eso te golpeo Jake, para que recapacites, tú y todos estos putridos homosexuales de la Universidad! --jiré sobre mis talones y me encaminé satisfecho de mi mismo.

Las calles de Londres estaban practicamente vacías; solo una que otra persona en bicicleta o sacando a pasear al perro. Mi vecindario era silencioso, casi ninguno de los vecinos se relacionaban entre si, eran muy cerrados, los niños no jugaban en el patio como todos, en cambio, nunca salian de sus casas. Yo lo apodaba "El pueblo fantasma".

Después de caminar unos minutos más llegué a mi casa, saqué las llaves y abrí la cerradura, rápidamente me quité la mochila seguido de la camisa, zapatos y medias. Vivía solo, mi padre era acaudalado por lo cual me depositaba una buena cantidad de dinero en el banco para todas mis necesidades: alquiler, comida y de sobras para pagar la Universidad. Siempre fui el típico niño bravucón y problemático, hasta ahora con mis dieciocho años lo seguía siendo, sinceramente no me importaba, tenía algunos conocidos, lograba echarme polvos con lindas chicas y mantenía al margen mis estudios. Se me daba muy bien lo que era el fútbol, de vez en cuando practicaba el boxeo para relajarme, sonreí cuando observé mi propia imagen en el espejo, tenía un lindo abdomen, solo faltaba un poco más de entrenamiento para tonificar.