Era vampirica

Agradecimientos

No sé cómo agradecerles todo el apoyo que me han dado a lo largo de estos años. Sé que la palabra «años» suena demasiado larga, pero en realidad: ¿se han sentido así?

Desde el año 2011 que comencé con era vampírica como un proyecto para probarme a mí misma. Era proyecto que tenía la finalidad de hacer una historia cruda, sin el típico romance que vemos a diario. Creo, si es que no estoy equivocada, que he logrado mucho más de lo que al principio creí que haría.

No les mentiré: algunas veces esta historia logró sacarme canas, llantos, desesperaciones y enojos. Liam y Caroline han sido, sin excepción alguna, una de esas parejas que han hecho lo que quisieron con mi mente y al final, me preguntaba: ¿por qué he hecho esto?  Sin embargo, a pesar de todos los problemas que tuve para armonizar la trama y enamorarme de mis propios personajes, puedo decir orgullosa que era vampírica es una de las historias más completas que he hecho hasta ahora.

Mis agradecimientos no pueden ser calcados en esta hoja y seguramente no lo harán. ¡Pero qué quedé claro! Lo intenté y lo seguiré intentando.

A cada uno que esté leyendo esto: gracias.

Gracias por apoyarme, esperarme, tenerme paciencia y simplemente estar ahí: leyéndome. Por hacer de era vampírica algo tan especial como para estar en este apartado final, leyendo las notas de esta emocionada pero melancólica escritora.

Sé que hubieran querido una secuela, pero cómo siempre he dicho: es de sabios saber hasta dónde poner el punto final.

Yo lo he hecho y créanme que me ha dolido. Sin embargo, hay muchas otras historias que están esperándome a que las termine o las escriba y no puedo estar amarrada a una sola, ¿verdad?

Espero que a Caroline y Liam los lleven siempre en el corazón y recuerden la moraleja que estuvo ahí pero que algunos no vieron: nunca dejes lo que realmente te importa hasta al final... porque tal vez sea demasiado tarde.

Como siempre he dicho, los amo con todo mi corazón. Gracias por ser unos excelentes lectores y estar conmigo en las buenas y las malas.

-Nancy A. Cantú

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«Cuando la gratitud es tan absoluta, las palabras simplemente sobran».

-Álvaro Mutis.