Hermanastra de BTS

CAPÍTULO 11:QUÉ ESTÁ PASANDO?

Salimos de clases, como dije, el profesor estaba de un pésimo humor,así que se le ocurrió ponernos un examen sorpresa.

Si, el segundo día de clases.

Pasaron dos eternas horas, insoportables también, cuando llegó el deseado descanso.

Vería a Kookie.

Nos dirigíamos a "nuestro sitio", claramente buscando con la vista a Kookie, cuando nos encontramos a Eleanor.

-Hola Eleanor, ¿te vienes?-preguntó Min, mientras yo seguí buscándolo con la mirada.

-Hola chicas, claro que iré.-respondió Eleanor, pero justo cuando acabó la frase la interrumpí.

-¿Dónde está Kookie?-dije sonando demasiado desesperada.

Min me sonrió pícara.

Eleanor la imitó.

-En el salón de música.-respondió Eleanor, señalando la entrada de la escuela.

-Gracias, os veo luego.-grité cuando me fui corriendo a la entrada.

Si no me equivoco, la sala de música estaba al final del pasillo.

Me fui caminando con cuidado y sin hacer ruido ya que me podrían ver, algo que no me gustaría.

Estaba delante de la puerta cuando oí una dulce melodía que creo que era del piano de cola de la sala.

Abrí la puerta con cuidado para no hacer ruido y me encontré al dulce Kookie, tocando el piano.

Me quedé en silencio admirando la música.

De pequeña, me acuerdo que mi padre tocaba el piano, cuando murió, le pedí a mi madre que si podía aprender, y mi madre aceptó sin problemas. Seguí con las clases, y debo decir que no se me daba nada mal. Cuando no vinimos, quería llevarme a menos, el teclado eléctrico, pero mi madre dijo que sería una molestia. Bah.

La melodía terminó, y Kookie me miró abriendo mucho los ojos sorprendiéndose de mi presencia.

-Em, hola, eh, Jiji, ¿que haces aquí?-me preguntó nervioso.

-No te veía fuera, entonces le pregunté a Eleanor, y me dijo que te encontraría aquí.-respondí. De pronto nos invadió un silencio un tanto incómodo, así que decidí romperlo.-Bonita melodía, no sabía que supieras tocar el piano.-le dije y pude notar un leve rubor en sus mejillas.

-Si, eh, aprendí de pequeño.-dijo.

-¿Puedo?-pregunté señalando el espacio vacío del banco en frente del piano.

-Claro.-respondió. Me senté y empecé a tocar música. Una de las primeras que aprendí.

Terminé y miré a Kookie, quién estaba aún más sorprendido que antes.

-Yo tampoco sabía que tocaras el piano, y así de bien.-dijo aún sorprendido por lo que estaba pasando.

-Ay, Kookie, hay tantas cosas que no sabes de mí.-contesté.

El dirigió su vista al piano y empezó a tocar una melodía que reconocía.

Empecé a tocar también, nos estaba saliendo muy bien, hasta que me equivoqué y puse mi mano en donde estaba la suya.

Noté que mi corazón martilleaba mi pecho, y que me empezaba a sonrojar muchísimo.

Lo miré y vi que él también se sonrojó, aunque no tanto como yo.

Por acto reflejo, quité la mano y me levanté del banco.

-Em, me t-tengo que ir, las chicas me esperan.-dije todavía nerviosa por lo que acababa de pasar.

-Si, ya va a tocar el timbre.-noté también cierto nerviosismo en su voz.-

-Por cierto, esta clase se abre con llave, y en el descanso está cerrado. ¿Cómo entraste?-pregunté.

-Ah, las ventajas de ser famoso, supongo. Me gustó la sala para los descansos, y con mis encantos conseguí una copia, y desde ahí, vengo a tocar en algunos descansos. ¿Mañana quieres venir?-preguntó después de su explicación con cierta ilusión en su voz.

-Claro, me encantaría.-respondí dedicándole una sonrisa.

Me sonrío.

Estoy en peligro cerca de este chico.

Me tiemblan un poco las piernas después de su sonrisa, así que se me hizo un poco difícil volver con las chicas.

Recorrí el pasillo de nuevo en silencio, ya que no me gustaría enfrentarme a ningún profesor.

Cuando salí del edificio,me dirigí a "nuestro lugar", cuando oigo unos gritos que provienen de ahí.

Llegué y vi a Min roja como un tomate y a Eleanor partiéndose de la risa en el césped.

-N-no p-puede se-er.-intentó hablar, ya que la risa no la dejaba.

-Deja de reírte.-dijo Min cabreada.

-¿Qué está pasando?-pregunté confundida, sé que para cabrear a Min, tienes que hacer algo muuuuy grave.

-Vale, allá va, ¿recuerdas cuando suspiraba y me preguntaste que pasaba?-preguntó a lo que asentí con la cabeza sentándome en el césped.-Bueno pues, kabhvsbsjsbsvskjnk.-dijo muy rápido y en voz demasiado baja como para que escuchara. Eso hizo que Eleanor riera aún más.

-¿QUÉ?-pregunté.

-Anda Min, dilo de una vez.-pidió Eleanor, Min me miró y suspiró.

-Que me gusta Namjoon...