Capítulo final: I

678 66 29
                                    

Por favor leer esto antes de continuar.

La fic tuvo cambios. Varios de los últimos capítulos subidos fueron eliminados debido a un cambio en la historia. Todo lo ocurrido en ellos no existe, no pasó jaja. Necesito darle un cierre a esta novela y luego de releer un poco la historia, sentí que los personajes ya estaban sufriendo demasiado, no tenía mucho sentido.

"Reputación" es el penúltimo capítulo oficial. Y este es el último capítulo, lamento si no les gusta o si es muy cliché o muy básico, pero es lo que siento necesitan los personajes.

Un abrazo a cada una, cerramos el año con el final de esta novela que tanto amé escribir. Gracias por leerme, sus comentarios fueron una luz para mi vida en este añito.

❤️‍🩹

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

❤️‍🩹

Siempre puedes volver a amar

"Feliz cumpleaños, Matilda", dice el inmenso cartel rosa en la entrada de la casa de los Vettel que leo una y otra vez, intentando entender cómo ha pasado tan rápido el tiempo.

No puedo creer que mi pequeña esté cumpliendo doce años. Juro que he tenido que aguantar las lágrimas de emoción desde que comenzó mi día.

—¡Julieta, llegaste! —exclama la cumpleañera, saltando a mis brazos apenas el nuevo mayordomo de la familia abre la puerta para mí.

La abrazo con fuerza, sintiendo el aroma de su perfume que elegimos juntas hace unos días en el centro comercial. Nuestras salidas a comprar se vuelven cada vez más recurrentes y eso me encanta, al fin tengo a alguien que me acompaña y no se queja.

—Feliz cumpleaños, mi vida —la felicito entregándole mi regalo.

Matilda abre sus ojos azules con emoción al recibir el paquete y se sienta en el suelo para abrirlo con más calma. Aquel vestido celeste con brillos que vimos en el escaparate de una tienda hace pocas semanas se encuentra envuelto pulcramente en la caja frente a ella. Río cuando de un salto se levanta del piso para abrazarme y salir corriendo hasta su habitación.

—¡Lo usaré ahora! —exclama agitada, subiendo las escaleras— ¡Gracias Julieta!

Emily con ya diecisiete años, niega con la cabeza acercándose hasta mi lugar. Siempre fue una niña preciosa, pero ahora, toda una adolescente se ve aún más linda. Ha cambiado bastante, madurado más bien, la repentina ausencia de su madre la hizo madurar de golpe y si bien pudo haber reaccionado de pésima manera, se tomó todo con calma, intentando ser optimista. Ya van muchos años de aquello y me alegra que al fin ya no sea un tema que se hable a murmuros por la casa. Es un tema superado.

—Es la quinta vez que se cambia ropa —me dice, besando mi mejilla como saludo.

Esa acción, a pesar de ser algo común entre nosotras, me hace recordar que cuando las conocí no eran así, bueno, excepto Matilda, que siempre fue dulce.

Lust for life Where stories live. Discover now