Capítulo XXXIV - Reputación

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Reputación

—¡Tengo miedo de que todo lo que dicen de mí te aleje! —exclamo, aguantando las lágrimas.

Mick niega con la cabeza, tan molesto como yo. Es nuestra primera discusión como novios, y está doliendo tanto como pensé que lo haría.

Los comentarios acerca de lo nuestro siguen en pie, escalando hasta límites inimaginables, es decir, hay personas que me reconocen en la calle y toman fotografías de mí como si fuera una persona del espectáculo, comentando cosas como que me vieron con uno y con otro e inventando historias al respecto. Es horroroso.

No puedo olvidar los gritos a nuestro alrededor luego de salir a pasear un rato por la ciudad, no tenemos paz ni privacidad. Jamás pensé que tendría que pasar por algo así.

—Te dije que no me importa, Julieta —su voz suena algo molesta, pero a la vez calmada, no entiendo cómo es capaz de hacer eso.

—¿Y si un día crees todo lo que dicen?

—No podemos estar suponiendo cosas.

Las lágrimas comienzan a caer de mis ojos debido a la frustración y el miedo. La he pasado tan mal con lo que se dice de mí que me puse paranoica.

—Esto será cada vez más difícil.

—No me importa.

—Mick, no estás entendiendo —hablo en un susurro cansado, mientras limpio mis lágrimas.

Él suspira, agotado— Tengo que preparar mis cosas para ir a Inglaterra este fin de semana.

Me quedo en completo silencio, sumida en mis lágrimas. No habíamos discutido antes, pero el tema acerca de mi reputación ha salido varias veces en nuestras conversaciones y siempre llegamos a lo mismo. El hecho de que a él no le interese lo que hable la gente es maravilloso, sin embargo, me hace sentir mal que pareciera que no importan mis sentimientos, que no importa qué pasa por mi cabeza durante estos momentos.

—Vete ya —musito en su dirección— Tal vez es lo mejor que te vayas de una vez y así yo no siga arruinando tu vida.

Mick no dice nada más y con frustración se va del lugar, dejándome sola con mi desespero, mis lágrimas y el dolor oprimiendo mi pecho. Siento que poco a poco esto provocará que nuestra relación se vaya a la basura, y eso es lo que más me asusta. Después de tanto sufrimiento, Mick es lo mejor que me ha pasado. No soportaría otra decepción más.

Me siento tan mal que nisiquiera el mensaje que Diego me envía trabajando en el restaurante de Thor me ayuda a sentir mejor. Es su primer día, y gracias a la amabilidad de mi suizo favorito tiene trabajo tocando el piano para amenizar el ambiente. Con sus dotes artísticos y encantadores será fácil que se gane el amor de todos los comensales. Yo debería estar allí ahora, apoyándolo, pero no, por esas horribles personas ahora paso la mayoría del tiempo encerrada, yendo sólo del apartamento al trabajo y viceversa.

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