As The World Falls Down • Kate Bishop x OC x Yelena Belova

Capítulo 12

25 de diciembre 2017

Mientras Lilith se quitaba el maquillaje en el baño de la habitación, miles de momentos en el Colegio no dejaban de llegar, desde que conoció a Margot y Fleur hasta que las vió por ultima vez. Luego esa chica, Michelle, ¿qué habrá sido de ella? En quien pensaba constantemente era en Kate… la chica que mas odiaba en el mundo.

—¿Quién es la niña Bishop? —preguntó Yelena colocándose al lado de Lilith para quitarse su propio maquillaje.

—Una ex compañera de escuela —habló y luego soltó un suspiró al recordar su despedida.

—¿Por qué te pusiste tan… extraña al oír de ella?

—Nos odiabamos —afirmó para despues salir de baño y colocarse la pijama.

Yelena salió minutos después con la cara lavada, tan hermosa como siempre, pensó Lilith. Se acostó a su lado con la pijama puesta y abrazó a la menor.

—Siento lo que pasó en el almuerzo.

—Fui para ver la pelea familiar y… yo estuve involucrada, no salió como esperaba —dijo con un tono de diversión.

Se estiró un poco y apagó la luz. Daban las diez de la noche, a esa hora acostumbraban dormir pero esa noche ninguna tenía sueño. Ninguna hablaba, cada una en sus pensamientos. Algo pasaba en la cabeza de Yelena y Lilith lo sabía, desde que volvieron de el almuerzo Yelena estaba mas seria de lo normal. Pensando y pensando.

—¿Está todo bien? —se ánimo a preguntar.

—Por supuesto… el trabajo, eso me tiene pensado.

—¿Ya me dirás de qué trabajas? —Yelena soltó una risita.

—Nop, nunca sabrás.

Luego de una noche dando vueltas en la cama Lilith despertó, Yelena no estaba. Dejó una nota de que debía ir a trabajar, Lilith se hizo un desayuno rápido y después fue a hacer ejercicio. Al volver la casa seguía vacía, algo se sentía diferente. La felicidad de la mañana pasada no estaba.

02 de enero 2018

Yelena volvió, abrió la puerta del departamento y cayó a un sillón, Lilith quien estaba en la cocina tratando de hacer galletas corrió hacia ella con preocupación y enojo. Yelena estaba pálida, sus labios no tenían color, respiraba con dificultad.

—¡¿Dónde demonios estuviste?! ¡ni una llamada, ni un mensaje! ¡nada!

—Estuve…

—¡Trabajando! ¡¿por siete malditos días?!

—Mi trabajo es de tiempo completo!

—¡¿Qué te impidió comunicarte conmigo?! —la mujer con dificultad se puso de pie, cojeaba un poco y se agarraba el abdomen, camino hasta la cocina siendo perseguida por Lilith quien seguía gritándole molesta.

Yelena bebió un largo trago de leche del galón, después con evidente irritación volteó a ver a Lilith contrayendo las cejas.

—¡Dejame en paz de una maldita vez!

—¡No! ¡te amo y me preocupas! —Lilith no quería llorar, no debía —estuve a punto de reportarte por desaparecida, Belova.

—En la ley tengo otro nombre, jamás me hubieran identificado —murmuró avanzando por el pasillo hacía la habitación aún cojeando y aferrándose a su abdomen —si no te molesta, iré a dormir.

Y le cerró la puerta en la cara y con seguro. Lilith hechando fuego de la molestia salió de la casa. Yelena era misteriosa y aceptaba eso, todos tenemos secretos pero desde que Yelena le contó la verdad sobre su origen Lilith teme de que algún loco venga por Yelena y quiera acabar con ella. Eso era lo que en verdad Lilith temía, que algo malo le pasara y ella jamás lo supiera.