Capitulo treinta y cuatro.

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Estoy sentada en una de las sillas de la comisaría, llevo al rededor de una hora aquí esperando a Sarkozy para que den la orden y me dejen verle.

Pocos minutos después llega junto a tres hombres, me lanza una mirada y sonríe.

—Cuarenta y cinco minutos.—dice serio y asiento 

Los guardias me acompañan a una de las salas, entro y me siento de nuevo en la silla esperando a que llegue.

Poco después la puerta se abre mostrándome a Segal, me mira confundido y yo me levanto lista para tirarme sobre él y abrazarle pero antes lo observo mientras le quitan las esposas.

Aunque sólo han pasado seis días puedo notar que no ha comido, ya que esta mas delgado, y lleva un moretón en su mejilla izquierda,¿qué le han hecho?

—Tienen cuarenta y cinco minutos.—dice el policía antes de salir 

Corro hacia él y lo abrazo de inmediato con mucha fuerza.

—Pensé que nunca podría verte.—murmuro y luego tomo su rostro dandole un pequeño beso en los labios 

—¿Cómo lo lograste?—es lo primero que sale de su boca

—Grant eso no importa, lo importante es que he venido a verte y tenemos que aprovechar esto.

El asiente y tomamos asiento.

—¿Te cambiaron del aislamiento?

Niega.

—Esos hijos de puta no quieren aceptar órdenes de nadie, sigo aislado.—hace una mueca—Pero lo único que quería es verte y ya que lo logré estoy satisfecho.

—¿Que te han hecho?—tomo sus manos y entrelazamos nuestros dedos

—No quieres saber pequeña, estoy bien, ¿cómo está Amellie?

—Bien, bien.—suspiro—Han alargado el juicio.

—No tienen pruebas y están buscando la manera de dejarme encerrado, comenzarán alargando el juicio.

—¿Has hablado con Sarkozy?

—Beth no me dejan hablar con nadie, y no quiero hablar con él porque te juro que si lo veo tendrán pruebas de que asesiné a alguien y no me arrepentiré.

—La única forma de sacarte de aquí es el estando muerto, maldita sea, como lo odio.

Frunce el ceño y me mira con cierta seriedad, como si estuviese tomando mis palabras literal.

—Grant...—murmuro, aprieta los labios

—No estoy pidiendo que tú lo hagas.

—Pero estas pidiendo que pase.

—Beth, estoy jodido, no saldré de aquí o sacarán pruebas falsas y me sentenciarán a muerte.—suspira

—Haré que Fabrizzio venga y te defienda.

—Un abogado no es suficiente.

—Entonces también haré que mi papá venga, y traiga a sus abogados, Grant te sacaremos de aquí. 

—La única forma es la que tu has dicho.—murmura y aprieta su mano a la mía 

Suspiro y luego de unos segundos asiento.

—Esta bien, pero no podemos involucrar a Michael.—murmuro

El niega.

—Le pedirás a Michael el número de un viejo amigo, el cual te va a ayudar a sacarme.

Shades Of Collapse {2}Where stories live. Discover now