De cristal. (One piece x Tú)

Usopp entra por "accidente"

Esto es parte de la saga de "Varones de One piece te cachan"

— ¡T/n, Sanji dice si quieee...

— ¡Waahh!— Gritó agudo.

Me encontré a t/n acostada en la cama, con ambas rodillas levantadas y separadas. Sus dos manos estaban entre sus piernas... Tocándose.

— ¡Pe-Perdon! ¡Yo solo venía...! ¡No te enojes! — Comencé a tartamudear como un tonto sabiendo que si alguien se entera de esto seré hombre muerto. Sanji jamás lo perdonaría.

— Usopp... ¡Solo cierra la maldita puerta!— Inhalé con un grito y sin pensar mucho y con movimientos torpes cerré la puerta conmigo adentro.— ¿Vas a quedarte ahí?

— N-No... Ya me iba...— Y cuando me di cuenta mis ojos ya estaban más que metidos en dónde no debía.

Al ver en dónde estaba mi mirada, René abrió más las piernas y pasó dos dedos por sus labios. Masajeando con el líquido que salía de ellos.

— Seguro que no has podido acabar...— Dije con la respiración alterada y lleno de deseo por meter mis dedos en ella. Mi entrepierna está durísima desde que la vi por accidente y así se ha mantenido.— Déjame ayudarte...

Sonrió con perversidad mientras me acercaba. Me posicioné sobre ella en la cama, no sin antes haberme quitado los pantalones que seguro me estorbaría.

Antes de empezar a jugar con mis dedos, le di un pico en la boca y unos besos en el cuello.

Elevaba su pecho reaccionando a mis besos.

La tomé del cuello y con la otra mano metí dos dedos en su boca para así llenarlos de su propia saliva. Los metí hasta su garganta asegurándome de que disfrutara la sensación.

Ya que siempre se ve feliz cuando se atraganta con mi polla.

Saqué mis dedos empapados de su saliva y de una bajé la mano comenzando a acariciar su punto g en círculos y pequeñas punzadas.

Cuando se trata de dedos, a ella le gusta más sobarse. Pero si se trata de otra cosa, le gusta más que la metan.
Y ustedes saben qué otra cosa.

— Ah... Ah así...— Yo sé que es así, pero aún así me gusta escucharla gemirlo.— más... Más rápido...

Recuerdo la primera vez que le hice esto, me dijo que tenía que hacerlo despacio. La primera vez que lo hice estaba muy nervioso.

Claro, la primera vez que lo hice con ella. Pero yo ya había metido mis dedos en alguien más... Aunque en ese tiempo no era tan bueno como ahora lo soy con t/n.

Ella es muy sensible y hablo en todos los aspectos, pero cuando se trata de esto, le encanta gemir y siempre me hace saber cómo se siente con sus gestos y sonidos.

Podría hacerla venir con solo darle seguimiento con mis dedos en su punto pero ¿Por qué no hacerla sufrir un poco metiendo mis dedos?

Bajé un poco más mis dedos, se sentía tan caliente y húmedo.

— No... Usopp, espera...

— Es tu castigo ¿De acuerdo?— Metí un dedo.

— ¡Aahh!

— ¿Por qué te das placer tu sola cuando hay cuatro hombres en este barco que pueden dártelo?— Metí dos.

— Ustedes... Han estado muy ocupados ¡Aahh!— Comencé a mover mis dedos dentro de ella. También sacando y metiendo hasta dentro.

— Para ti... Jamás estaremos ocupados...— Mi polla también quería atención y estaba a punto de estallar, tanto que dolía.

Así que mientras se lo hacía a ella, con mi otra mano sobe mi entrepierna sobre la ropa interior, dándole tan si quiera un poco de atención.

— Usopp-kun... ¿Por qué no la metes?

— No tengo condones, no lo haré..

Definitivamente no iba a meterla así, no tenemos esas pastillas raras y no me voy a arriesgar.

— ¡Aahh! ¡Usopp! — Estaba apunto de venirse.

Sentía sus paredes contraerse y apretar mis dedos hasta que ese momento de gloria llegó.

— ¿Te gustó?— Me acerqué a su boca para besarla.

— Me ha encantado... Ahora yo quiero...

— Lo lamento t/n, déjame encargarme de esto ¿Si?— Me puse la ropa y aunque estuviera reprochando y pidiendo que me quedara, me fui y la dejé sola.

Salí de la habitación mirando a todas partes para asegurarme que nadie viera mi pequeño problema allá abajo y cuando me aseguré, caminé al baño.

— ¿Te corriste con solo verla venirse?— Dijo una voz burlona detrás de mi y sabía de quién era.

— Cla-Claro que no...— Me giré con la espalda recta pero con mis dos manos tapando ahí abajo.

Se acercó a mi, tenía su cuerpo tan pegado al mío que si no fuera por mis manos que me tapaban, su pierna me hubiera rozado  y con su mentón apoyado en mi hombro me dijo...

— Tsk... Ve a solucionar tu problema y después baja a cenar, le avisaré a René-chan.

— A- Aún está... Bueno, creo que ya...

— Tranquilo, yo si tocaré la puerta.— Por alguna razón se pegó un poco más a mi y después se fue caminando.

Quería cuestionarme todo lo que había pasado pero yo solo quería tocarme ahora mismo o iba a explotar.

Fin del cap

Omg ¿vieron que el pervertido del barco se acercó intencionalmente a Usopp con su pilín parado?

Usopp... Werito... ¿Qué se traen?

La primera persona en comentar pidió a Usopp y aquí lo traigo antes que los demás.

Perdón por la espera.

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