No hay tiempo II: Esperaré... Hasta que me perdones

Aeropuerto

ADVERTENCIA... ME VAN A QUERER MATAR CON ESTE CAPITULO...

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-Que tal preciosa?

-Acaso tu pasatiempo es merodear por todos los aeropuertos del país?

-No, quizás solo este, o tal vez es que te merodeo a ti

-Ya basta Erick, qué es lo que quieres

-Porque tengo que querer algo, solo deseo hablar contigo

Violeta se comenzó a enfadar un poco, aquel tipo no le daba buena espina y ya sentía que era un vampiro y se le notaba que no tenía las mejores intenciones, Erick le preguntó donde se dirigían a lo que ella se negó rotundamente, y cuando estaba por entrar al baño, éste la tomó del brazo y le dijo que no importaba el lugar donde se fuera a esconder, siempre la encontraría, a ella y a Evan, Violeta se soltó agitando fuertemente su brazo y por fin entró al baño de mujeres.

Maldecía por lo alto mientras se terminaba de lavar las manos y cuando volteó para salir por la puerta, vio a Jenna tapándose la boca dejando escapar solo una leve risita y luego le extendió la mano para que salieran juntas del lugar a lo que Violeta aceptó y mejoró su humor de inmediato, aunque sabía que debía contarle a los chicos lo sucedido.

Ross vio a Jenna y a Violeta caminando juntas y le pareció una imagen perfecta, la mujer que ama y su amada hermana juntas caminando, en ese momento deseó tener una cámara y poder sacar una fotografía, pero se conformaba con mantener ese recuerdo en su memoria, uno de los pocos, uno de los primeros que construía junto a su hermana y junto a Jenna.

-Amaaaaaaaaaa, pareció una eternidad sin usted, no me deje solo con estos chupa sangre –Le dijo Klaus a Violeta en un puchero, a veces se comportaba como un niño, pero a ella no me molestaba-.

-A que hora sale nuestro vuelo –Dijo Violeta brindándole una mirada un poco más larga de lo habitual a Evan-.

-Primero no te querías ir y ahora vas a apurar la salda Violeta, ¿qué pasó? –Interrumpió Criss-.

-Bueno, pues me he topado con Erick y está un poco más raro que de costumbre- Respondió ella muy tranquila-.

-Pero Violeta –Dijo Evan corriendo a su lado y dándole un abrazo muy apretado como protegiéndola, le acaricio el cabello y el rostro muy preocupado, de pronto en el brazo que le sostenía la espalda a Violeta, comenzó a sentir una leve sensación de calor que fue aumentando.

-Pero que rayos –Dijo en voz alta-.

-Que pasa Evan –Preguntó Violeta por el violento sacudido que le dio-.

-No lo sé, solo sentí que se me estaba quemando el brazo mientras lo mantenía en tu espalda –Respondió el muy confundido-.

Criss le examinó el brazo a Evan y vio que tenía un circulo perfectamente quemado en él y con cierta forma, después Jenna le fue a revisar la espalda a Violeta por si esta se había quemado también, pero en el lugar donde Evan se había lastimado, ella tenía un tatuaje de forma circular que parecía completar de cierta forma el tatuaje de Klaus, así que todos se quedaron mirándolo a él.

-No tengo idea, a no ser que sea parte de la leyenda-.

-Hablas de la leyenda de la unificación- Interpuso Ross-.

Jenna, Evan y Criss se miraban confundidos, ninguno sabía qué era lo que significaba ese nuevo tatuaje en forma circular en la espada de Violeta, hasta que de pronto Klaus comenzó a hablar y a relatarles la historia de la unificadora, se trataba de una vieja leyenda que tenían los cazadores, que en un inicio, ellos eran simplemente justicieros que mantenían la balanza entre vampiros y humanos, y que no se dedicaban a matarlos, sino que a impartir un juicio justo dependiendo de los crímenes que hubiesen cometido, y vivían juntos en armonía y paz, incluso muchas veces vampiros contarían matrimonio con cazadores y solo en algunos casos, debían matarlos, pero eso se daba más que nada a aquellos que vivían fuera de la ley por llamarlo de alguna forma.