El equipo de futbol de la universidad de Doncaster tiene un capitán realmente exigente. Por suerte un rizado es siempre el jugador designado para convencerlo de reducir, al menos un poco, la intensidad del entrenamiento. Hoy es enviado por sus compañeros a hacer su trabajo pero deciden, por primera vez en año y medio, espiar como el ojiverde lo convence para imitar su técnica.